Elecciones del 20 de mayo en la República
Bolivariana de Venezuela
Las elecciones se efectuaron con normalidad, no hubo
incidentes globales que entorpecieran el proceso; asunto éste que es de
cardinal importancia, esto significa que los conflictos que estuvieron
ahogando cada una de las 25 elecciones efectuadas en 18 años, están siendo
resueltas. Sin lugar a dudarlo, veremos los movimientos de la reacción fascista
en los próximos meses que seguramente, financiados y dirigidos por el imperio,
realizarán lo inimaginable para seguir martirizando a este noble pueblo.
Esta normalidad es especial dado la increíble presión
mundial dirigida por el Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica para evitar
que se dieran las mismas, por cuanto la fecha en que fueron convocadas les
desmontaba su estrategia de manipulación electoral a través de la inhumana
guerra económica; la que seguramente les hubiera resultado si se efectuaran 6 o
7 meses más adelante, plan este que pasaremos a analizar en breve en este
balance.
Nicolás Maduro Moros recibió 6,157,185 votos de una
coalición de Partidos y Organizaciones que se distribuyó así: El PSUV (Partido
Socialista Unido de Venezuela) obtiene el 57.23% de los votos; el movimiento
Somos Venezuela el 4.07%; el Partido
Comunista de Venezuela, el 1.85%; Tupamaro, 1.07%; PPT, 0.99%; el resta que
suman 5 organizaciones, representaron el 2.5% de los votos. Por otra parte, el
candidato opositor que más se le aproximara logró 1,920,597 votos y el otro 988,761;
los que sumados juntos representaron el 32.09%
Nicolás Maduro gana con el 67.8% de los votos emitidos,
sobre un total de sufragios del 31.7% de todos los que estaban habilitados para
ejercer el voto en Venezuela. Solo para comparar lo que representa este
triunfo, el que al final cada elección no es otra cosa que una encuesta
ampliada, tenemos que observar que la Primer Ministro de Alemania, Merkel, gana
con tan solo un 25% de participación del Censo Electoral de ese país; Trump,
con el 27.3% del total del censo de Estados Unidos; Macri, con el 26.8% del
padrón total de Argentina; Santos, con tan solo el 23.7% del de Colombia. No
sigo anotando cifras porque sin lugar a dudas, el 31.7% de los venezolanos que
fueron a votar, representa una alta cifra, no la deseada, pero superior a todas
las expectativas comparativas con la mayoría de los países capitalistas del
orbe.
ESTRATEGIA IMPERIAL
ACTUALIZADA
Veamos pues cuál fue la Estrategia imperial que la dirección
revolucionaria de la República Bolivariana de Venezuela ha derrotado. En el
micro ensayo publicado el 30 de diciembre de 2017 titulado “Venezuela sigue
siendo la piedra en el zapato del imperio”(1)
exponemos la intensión del Capitalismo Fascista sobre Venezuela,
comparativamente a los resultados de cómo se comporta el electorado ante una
situación de asfixia total de su economía, a partir de los sucesos y resultados
en Panamá cercada económicamente por
tres años antes de las elecciones de mayo de 1989 y que dieron como
resultado la invasión del 20 de diciembre de ese mismo año.
Curiosamente fue publicado ese análisis comparativo antes de
que la Asamblea Constituyente venezolana decidiera, el martes 23 de enero de
2018, convocar las elecciones para el mes de mayo del año en curso. Y aunque
entendía perfectamente que era una jugada maestra, no dejaba de preocuparme, porque en Panamá vimos grandes y mssivas movilizaciones de respaldo al candidato Carlos
Duque; y al final el hambre, la necesidad y la desesperación, pudieron más. En ese
entonces, la sorpresa inesperada de
la avalancha de votos opositores, a la 11:30 p.m. se dio la orden de anular las elecciones, y
allá fuimos a recoger las actas.
Sorpresa ésta, muy parecida a la que tuvo el chavismo en diciembre de 2015; con
la diferencia de que el Gobierno de
Venezuela aceptó estoicamente la contundente derrota.
El 7 de diciembre de 2015, esa misma madrugada luego de ese
desconcertante desastre, donde la oposición en Venezuela gana 99 escaños y las
fuerzas revolucionarias 46, escribimos un pequeño informe a manera de balance
titulado “Venezuela, se pierden batallas no la guerra” (2); no dejando que el
cansancio me tumbara sin publicarlo, enviarlo a la red y a los principales protagonistas de la
revolución bolivariana. En el mismo hicimos una primera reseña comparativa con
la guerra económica que le aplicaron a Panamá y su repercusión electoral.
Escribíamos en ese entonces que dichas elecciones “además indica, que las
condiciones en que se realizan ya están manipuladas, lo que las hacen
ilegitimas. Sin lugar a dudarlo, el que el Chavismo haya ganado 18 de las 20
elecciones -en estas condiciones someramente descritas- ha sido una proeza
histórica inimaginable"; es inimaginable, porque todas las 20 elecciones
efectuadas en 15 años, son elecciones dentro de los parámetros legalistas
capitalistas y bajo una total intervención de los Estados Unidos. Hoy, ya son
25 elecciones, de las cuales el chavismo ha ganado 23.
A renglón seguido en el siguiente párrafo del escrito -arriba
señalado- expusimos: “Por un asunto de motivaciones necesarias en estos
momentos difíciles no solo para los revolucionarios venezolanos sino para los
de América Latina que miran, como diría Pablo Neruda, con ojos oscuros,
quisiera recordar que en la Revolución Francesa hubo tres intentos de ella; los
dos primeros fracasaron, fue el tercero cuando
entendieron que solo destronando a toda la Aristocracia de Europa
podrían salvar la revolución. A la misma conclusión llego Simón Bolívar y San
Martín, que sólo derrotando a los españoles en toda América podrían salvar sus
revoluciones.” Esto se refiere a que mientras el capitalismo sea el sistema
hegemónico del mundo, las revoluciones terminarán siendo evoluciones.
De igual forma el 4 de marzo de 2016 en el artículo ¿Será la
invasión del imperio a Venezuela lo que viene? (3), escribíamos que “Indica
esto además, que la escases de los productos de consumo provocada por los
empresarios dirigidos por los Estados Unidos, se va a profundizar. Parecido fue
en Panamá en 1989, nos pusieron a pasar hambre por tres años para que votáramos
con su propuesta y luego nos invadieron.”
#USAlaViolencia pretendía
aprovecharse de la verticalidad moral y ética del mejor sistema electoral del
mundo, para manipular la voluntad del electorado con el chantaje del TERROR;
terror a las necesidad permanente, miedo a la desesperanza, espanto a la
guerra, en fin terror a la incertidumbre al desasosiego... y de esta forma en
un solo frente de voluntad fascista, encausar electoralmente toda esa vacilación inducida por
18 años de agresión sostenida, de perversa e infernal guerra a los principios
fundamentales de auto determinación de los pueblos. Es por ello el ingrediente
de presión sobre el tema de la posible invasión directa que se fue agudizando
en la medida en que se aproximaba el 20 de mayo, tenía como objetivo azuzar el
miedo; hasta me imaginé que realizarían algún acto de provocación directa e
inmediata próxima a ese día.
El que #USAlaViolencia (Estados Unidos) amenace con invadir,
no es ninguna historieta de fantasía o una broma, ellos invadirán con ferocidad infernal
sin importarles cuantos millones de inocentes venezolanos asesinen en el
momento en que la dirigencia revolucionaria se descuide, en el momento en que
encuentren las más mínimas circunstancias que le permitan tal crimen de “lesa
humanidad” sin que les importe en lo mínimo los reclamos de nadie; así han
venido actuando desde siempre. Para lo cual ya tienen sus planes hechos, a
espera de la oportunidad. Necesitan liquidar a toda costa el ejemplo que la
revolución venezolana representa.
LOS RESULTADOS SON
HEROICOS
El resultado que hubo en Venezuela este 20 de mayo demostró
ampliamente nuestra hipótesis, unos meses más y el imperio logran su acometido;
pero también demostró la vasta experiencia, madurez y conocimientos teóricos
que gozan la dirigencia revolucionaria bolivariana al tomar las puntuales
medidas y
ganarle al imperio la ventaja
estratégica. Al final se impuso la dictadura democrática de los
trabajadores… Porque de todos es conocido que lo que hay en el mundo
capitalista es una dictadura electoral burguesa; ya desde el siglo XVII,
Quevedo escribía su magistral poema
“Poderoso Caballero es Don Dinero” (4); en
los albores del inicio del capitalismo ya estaba claro el entorno de la lucha
de clases que se imponía.
Definitivamente el liderazgo, vasto conocimiento del
Socialismo Científico y de las ciencias sociales en general de Hugo Chávez
Frías está teniendo sus frutos. Chávez ha demostrado ser el dirigente más
importante en la historia luego de Lenin, el tiempo lo confirmará; recogió la
bandera aparentemente derrotada del socialismo e inició todo nuevamente; en
este contexto en el capítulo Legado de Hugo Chávez, del libro es inevitable
escribo en la pág. 153, que “En esa tenebrosa
década, llena de
incertidumbres revolucionarias,
surge en 1998,
como el ave
Fénix, de las entrañas
de las cenizas
con su plumaje
rojo incandescente, la figura
de Hugo Chávez
Frías blandiendo con
orgullo y destreza la Espada
de Bolívar.” Chávez no escribió nada,
pero lo dejó todo grabado.
En la página 167 de ese mismo libro acotamos que "Hugo Chávez
con su práctica
revolucionaria de carácter electoral
ha demostrado al
mundo, justo en el
momento histórico en
que la sociedad
necesitaba ese conocimiento experimental,
que la Coexistencia
Pacífica es la nueva
ley por donde
tienen que transitar
las nuevas revoluciones; entendiéndola
no en el
contexto de la existencia
de Estados Diferenciados
como erróneamente era vista,
sino, y es
lo más importante,
en el seno
mismo del Régimen
Socialista."
Los términos de la lucha electoral lo impusieron los
revolucionarios al adelantar la fecha de los comicios, nuevamente ha sido una
jugada maestra como la mayoría de las que han estado practicando desde hace 18
años, bajo una continua guerra impuesta desde la Casa Blanca. Si no hubiera
sido por esa terrible guerra económica y sicológica, el chavismo hubiera
obtenido con creses más de diez millones de votos; al final fue el voto duro el
que definió el triunfo, más que suficiente; ni que decir de los planteamientos tácticos
de la dirigencia al respecto. Y fue muy sabia la decisión de convocar a la Asamblea
Constituyente, primero; y después, de que esta adelantara la fecha de las
elecciones. Los votantes y sus dirigencias han demostrado ser héroes, dignos
hijos de Bolívar y Chávez.
Se entiende que en 18 años era obligada las subidas y las
bajadas, las transformaciones sociales no son una línea recta... pero zigzaguea
entorno a una línea ascendente; era necesario que las bases adquirieran y
adquieran conciencia de las tareas por construir y eso no se logra con barita
mágica. Decía el General Omar Torrijos que “somos unos convencidos de que es
imposible lograr una transformación presionando de arriba hacia abajo; si ella
no tiene su base de sustentación en el hogar, en el barrio, en la comunidad,
esa transformación no se puede garantizar”; y decía además que "un solo
milímetro en la correcta dirección histórica, es un avance mil veces mayor que
un metro en la dirección opuesta" ; y es exactamente lo que se está forjando
en Venezuela en todos estos años: acompañar a las masas en su experiencia
revolucionaria y caminar milímetros en la dirección correcta.
Ahora falta darle profundidad al proceso revolucionario,
porque el hambre, la necesidad, la desesperanza, traiciona cualquier ideal por
muy cristiano y revolucionario que
sea. Esa transformación pasa por el camino de cambiar el orden constitucional
de las elecciones presidencialista; éste es un sistema que “permite que la
corrupción penetre sus liderazgos y genere un creciente deterioro tanto en
cuanto a las tareas por resolver, como de la opinión pública que observa los
acontecimientos” (las comillas son del análisis sobre el escrito Quién ganó en
Argentina, (5)). Lo más representativo, maduro y democrático es la elección del
poder sobre las bases del parlamentarismo popular.
Toca completar la tarea de voltear la tortilla (como cantara
Víctor Jara), lo que no indica que hay que eliminar el desenvolvimiento de la
empresa privada… pero sí liquidar sus aspiraciones de controlar un poder al
cual ellos no tienen derecho por ser la absoluta minoría…
En cuanto a lo del sufragio, Engels en su libro “El origen
de la familia” nos escribe que “el sufragio universal, es de esta suerte, el
índice de la madurez de la clase obrera. No puede llegar ni llegará nunca a más
en el Estado actual, pero esto es bastante. El día en que el termómetro del
sufragio universal marque para los trabajadores el punto de ebullición, ellos
sabrán, lo mismo que los capitalistas, qué deben hacer.” Es exactamente lo que
está sucediendo hoy, los trabajadores en la República Bolivariana de Venezuela
están sabiendo exactamente qué deben hacer.
Por otro lado Lenin nos indica algo realmente importante en
su libro “La enfermedad infantil del izquierdismo”, cuando nos escribe que
“después del derrocamiento de la burguesía en un país, el proletariado del
mismo sigue siendo durante mucho tiempo más débil que la burguesía, debido
simplemente a las inmensas relaciones internacionales de ésta y en virtud de la
restauración, del renacimiento espontáneo y continuo del capitalismo y de la
burguesía por los pequeños productores de mercancías del país donde ésta última
ha sido derrocada.” Su importancia
radica en que en ningún momento los teóricos del Socialismo Científico, los que
dieron inicio a todas las transformaciones y revoluciones que han ocurrido en
el siglo pasado y las que ocurrirán, niegan la existencia y convivencia de la
empresa privada en el marco de una revolución de los trabajadores en su
construcción del socialismo. Pero si queda claro que el poder y todo lo que
esto implica tienen que estar bajo el absoluto control de la mayoría de la
población que obviamente es la clase trabajadora…
Moisés Pinzón Martínez
Panamá, 22 de mayo de 2018
4.- Francisco de Quevedo, Poderoso
caballero es don dinero
https://www.youtube.com/watch?v=5lgn9uEHLc8
5.- Quién ganó en Argentina
http://pinzonmartinez.blogspot.com/2015/11/quien-gano-en-argentina-reflexion-no.html
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