LOS MÁRTIRES HABLARON CLARO
(15 entrega)
Sin lugar a dudarlo, los tratados Torrijos-Carter fueron el resultado de décadas de lucha del pueblo panameño que se iniciaron el mismo día de su construcción; dado que esperábamos que dicha inversión mejoraría nuestra crisis económica,
sucediendo todo lo contrario: los gringos trajeron de todo, incluyendo sus empresarios, agricultores, etc. y le dejaron a los panameños la prostitución, el alcohol, los arrabales para alquilar y las drogas.
Realidad que evitó la colonización de nuestras mentes. Junto a las fuerzas revolucionarias y democráticas
populares que prosperaban dentro del movimiento patriótico, muchos de los principales promotores políticos del anti-imperialismo surgieron de las capas medias, pequeña y gran burguesía, ante la prepotencia racista del imperio.
El 9 de enero de 1964 fue el punto de inflexión de un proceso de acumulación histórica de luchas sociales en la
búsqueda de nuestra nacionalidad y bienestar social de los excluidos –la mayoría de la población- donde por primera vez queda claro que masivamente el pueblo panameño
no le interesaban las concesiones gringas sobre el Canal de Panamá; muy por el contrario, se impuso la consigna de
“un solo territorio, una sola bandera”.
Hoy, al margen de todos los entuertos que han quedado sueltos en ese proceso de unificación de nuestra nacionalidad,
la prioridad es la lucha por eliminar la
“sexta frontera” que jamás se
logrará dentro de los límites del
neoliberalismo salvaje donde todos los años se
incrementan las utilidades de la burguesía y se
reduce la calidad de vida de la clase trabajadora conquistadas en la Revolución Torrijista.
Sin embargo, el asunto del progreso a lo largo de la historia
jamás ha sido un todo o nada; muy por el contrario, ha sido un proceso de soluciones escalonadas: en ocasiones dramáticas
(revolucionarias), en ocasiones evolucionistas
(reformistas), en ocasiones de retroceso
(reaccionarias).
Luego de la
Revolución de Liberación Nacional Torrijista (1969-1979), cuyos logros son incuestionables (aunque pequeños sectores de dirigentes populares
“confundidos” hacen un tremendo esfuerzo en negarlos), en la etapa
pos invasión, ha sido el
PRD el que históricamente ha
construido la institucionalización en medio de un
proceso reformista (seguro, preferiría la continuidad del
Torrijismo revolucionario); y han sido los gobiernos opositores a él los que la han destruido para poder robar a mansalva, retrotrayendo en forma abrupta las posibilidades de soluciones, de pronto no revolucionarias pero si allanando el camino hacia una prosperidad democrática como rezan los estatutos de PRD; y creando condiciones que viabilicen la instauración de un poder revolucionario.
Las banderas de luchas revolucionarias son las que LOS MÁRTIRES nos HABLAN CLARO; señalando la ruta de dejar a un lado todas las bazofias consignarías que distraen el verdadero objetivo de las tareas que nos
llevarán a dar el salto desde el reino de la necesidad al reino de la abundancia social, y que es la de *imbuir* en nuestra militancia y en las masas la
lucha sostenida y permanente por resolver los problemas de desempleo, indigencia, salud, educación, seguridad, aseo público, corrupción, etc. que se resumen en
“por una justa distribución de la riqueza entre todos los panameños”.
Y finalmente siempre escucho sobre la espontaneidad de la gesta del 9 de enero, lo que es totalmente falso;
los héroes del 64 junto con todos los que los precedieron nos exigen armar y fortalecer
organizaciones revolucionarias que fueron las que con su constancia y abnegación lograron esa fenomenal gesta y su consecuencia directa de la Revolución Torrijista. Dirigentes y organizaciones hoy parecieran sufrir de amnesia sobre lo que determinó sus gloriosos resultados para el beneficio de la patria y de todos los excluidos de aquellos tiempos.
POR UNA AUDITORIA POPULAR QUE VIGILE CÓMO SE GASTAN E INVIERTEN LOS RECURSOS DEL CANAL.
POR UN CENTRO DE VIGILANCIA QUE DENUNCIE Y ACUSE JUDICIALMENTE A GERENTES Y ADMINISTRADORES DE LA ACP QUE TRASGREDEN LAS REGLAS Y MANUALES DE FUNCIONAMIENTO PARA IMPONER A SUS MALCRIADAS ÉLITES.
POR EL USO MÁS COLECTIVO POSIBLE DE LOS RECURSOS DEL CANAL
Omar
Moisés Pinzón Martínez
Panamá, 9 de enero de 2020
*COMPÁRTALO*
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Estos son los nombres de nuestros héroes y mártires de enero:
Ascanio Arosemena
Ezequiel González Meneses
Estanislao Osorio
Víctor Manuel Iglesias
Gonzalo Crance Robles
Teófilo de La Torre
Alberto Oriol Jr.
Rodolfo Benítez Sánchez
Víctor Manuel Garibaldo
Figueroa
Ricardo Murgas
Rosa E. Landecho
Maritza Alabarca
Rogelio Lara
Jacinto Palacios Cobos
Vicente Bonilla
Jorge Enrique Gill
Alberto Nicolás Constante
José del Cid
Ovidio Lizardo Saldaña Armuelles
Renato Lara
Sargento Celestino Villareta
PROHIBIDO OLVIDAR
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