El petroleo bajo de precio

«LA MISIÓN DE UN DIRIGENTE ES SER IMPRESCINDIBLE POR EL MENOR TIEMPO POSIBLE.» General Omar Torrijos Herrera.
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martes, 22 de agosto de 2017

Julio Yao, para entender la invasión de Estados Unidos a Panamá

Panamá

Para entender la invasión de EE.UU. a Panamá

Por: Julio Yao; Ex asesor de política exterior, ex agente de Panamá ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, catedrático de Relaciones internacionales (Noviembre de 2000) 

PANAMÁ. IRAK, YUGOSLAVIA ... ¿Y COLOMBIA?

La invasión de Estados Unidos a Panamá fue precedida por un completo programa de desestabilización en el cual se empleó el arsenal total de la inteligencia estadounidense. El patrón intervencionista, ahora perfeccionado, se remonta a 1950-1953, cuando la CIA diseñó el derrocamiento de Mossadeq en Irán, para reemplazarlo por la horrorosa tiranía del Sha; a 1954, cuando la CIA derrocó a Jacobo Arbenz en Guatemala, para implantar gobiernos dictatoriales que diezmaron cientos de miles de indígenas; a 1965, cuando invaden República Dominicana para eliminar a Juan Bosch y derrotar a fuerzas constitucionalistas; a 1970-1973, cuando la CIA intentó impedir la victoria en las urnas de Salvador Allende y luego intervino en su derrocamiento, que ocasionó la muerte de más de 30,000 personas. Ni hablar de las intervenciones de la CIA en la península coreana, Indonesia, Filipinas, y en toda la región latinoamericana y caribeña.

Estados Unidos satanizó y planificó el asesinato de los dirigentes de Cuba, Libia, Iraq y Yugoslavia y donó cientos de millones de dólares a la oposición política en esos países. Estados Unidos bloqueó la mediación de la O.E.A. para una solución pacífica a la crisis en Panamá y bloqueó e impidió el rol del Consejo de Seguridad como principal órgano responsable por el mantenimiento de la paz y la seguridad en Cuba, Iraq, Libia y Yugoslavia.
Estados Unidos, sin declaración de guerra emitida por su Congreso (en violación del "War Powers Act"), agredió a Panamá, Iraq, Libia y Yugoslavia, matando e hiriendo a considerable cantidad de personas civiles e inocentes.

En cuanto a Yugoslavia -y sólo para mencionar sus acciones desestabilizadoras anteriores al inicio de los bombardeos en abril de 1999-Estados Unidos, tal como hizo en Vietnam y con los "contras" de Nicaragua, organizó (con la complicidad de la OTAN) y financió con drogas al KLA (Ejército de Liberación de Kosovo); autorizó la participación de "fuerzas especiales" secretas en Kosovo; organizó al ejército croata, cuyos generales se sumaron al KLA; conspiró y conspira aún para desmembrar y disolver a la República Federativa Socialista de Yugoslavia; aplicó una terapia de shock para disminuir la productividad y agravar la deuda externa de Yugoslavia, de modo que las riquezas de este país quedaran a merced del capital extranjero (globalización) y aumentara la pobreza de los yugoslavos. 

Estados Unidos vetó la ayuda a las seis repúblicas de Yugoslavia para crear un ambiente artificial para la separación e impuso sanciones a Yugoslavia, suspendiéndoselas a las repúblicas que se separaron. Estados Unidos creó un Tribunal Ad Hoc para satanizar a la dirigencia Serbia, Slobodan Milosevic en especial, pero, por otro lado, rechazó la creación del Tribunal Penal Internacional creado por las Naciones Unidas para que sus líderes políticos y militares (Reagan, Bush, Cheney, Powell, etc.), escaparan a la jurisdicción del Tribunal aprobado en Roma. Estados Unidos usó los medios de comunicación de alcance internacional para crear apoyo a su propaganda de guerra, justificar sus agresiones y satanizar a los eslavos, serbios, árabes, palestinos y musulmanes como asesinos genocidas.

Estados Unidos se ha constituido en la única superpotencia mundial con capacidad de agresión sin límites: no reconoce la autoridad de las Naciones Unidas ni respeta el Derecho Internacional. No admite límites geográficos ni políticos a su política de dominación mundial. Aparece como "campeón de la democracia" y líder del "mundo libre", pero en realidad su único interés es saciar los apetitos de su oligarquía y de su complejo industrial y militar mediante su acaparamiento del mercado mundial y las riquezas de los demás pueblos. Estados Unidos, el único Hegemón de la Historia, es el enemigo público número uno de la Humanidad. 
SANCIONES, DEMONIZACIONES Y AGRESIONES COMO INSTRUMENTOS INTERVENCIONISTAS 

La invasión a Panamá había sido precedida por la invasión a Grenada en 1983 y era como un presagio de lo que ocurriría mientras se derrumbaba el antiguo campo socialista: era la primaria invasión de la Postguerra Fría. Estados Unidos pretendió inaugurar un nuevo Orden Internacional bajo su égida, y Panamá fue un tubo de ensayo para futuras agresiones. En Panamá se aplicó por primera vez el concepto de la soberanía limitada de los Estados.
Con la disolución de la Unión Soviética, Estados Unidos y sus aliados en la OTAN comprendieron que podían actuar sin contrapeso alguno para imponer sus decisiones y concepciones estratégicas y de seguridad. El mundo, con unas Naciones Unidas impotentes, estaba a la merced de las potencias imperialistas con Estados Unidos a la cabeza.

Ahora bien: cuando Estados Unidos decide destruir a un país enemigo, por las razones que fuesen, aplican sanciones de diverso tipo: comercial, económica, financiera, política, diplomática, así como presiones mediante instituciones u organizaciones internacionales, con el fin de debilitar la base del poder político en dicho país. De este modo buscan asfixiar la economía del país y crear una crisis artificial para que el descontento de las masas identifiquen como culpable a sus dirigentes políticos y traten de derrocar al gobierno.

El gobierno de Estados Unidos -a través de la CIA- emplea su influencia avasalladora dentro y fuera del país para desacreditar, no solamente al país sino a sus líderes en particular. Se les acusa de todo lo que sea necesario para enlodarles su reputación. Lo que menos importa es si las acusaciones son ciertas: lo que importa es que la gente cree a ciegas lo que canalizan los medios de comunicación. En este sentido, la CIA impacta los mecanismos profundos del inconsciente colectivo para moverlos en la dirección que conviene a sus intereses. Mientras más se vilipendia, mejor.

Así, los dirigentes escogidos como blanco de la CIA se convierten progresivamente en monstruos ante la opinión pública. Se dejan filtrar en los medios, informaciones falsas acerca de sus vidas personales, gustos específicos, estilos de vida, vicios, aberraciones, fanatismos y creencias religiosas, condición moral y sus principios.
Como lo ha explicado Noam Chomsky: "Cuando la Casa Blanca decidió que su amigo Noriega estaba volviéndose demasiado arrogante y tenía que irse, los medios de comunicación siguieron las indicaciones y lanzaron una campaña para convertirle en el demonio más vil desde Atila el Huno, una repetición del proyecto contra Gaddafi de algunos años antes. Este esfuerzo se identificó con el engaño de la 'guerra contra la droga'...La operación de propaganda fue un éxito aplastante. 'Manuel Noriega pertenece a esa especial hermandad de criminales internacionales, hombres como Gaddafi, Idi Amin o el Ayatolá Jomeini, a quienes los norteamericanos les encanta odiar', salmodió Ted Koppel, de modo que 'un fuerte apoyo público a una represalia estaba casi garantizado'. ¿Por qué odiaban los norteamericanos a Noriega en 1989 y no en 1985? ¿Por qué era necesario derrocarle ahora pero no entonces?."

Sin embargo, con anterioridad al gobierno de Estados Unidos le bastaba utilizar las sanciones solamente, sin satanizar a sus enemigos personalmente. Cuando las sanciones no surtían el efecto deseado, Estados Unidos empleaban la fuerza, desde el bloqueo naval o la prohibición de exportar ciertos productos de carácter bélico (armas, municiones, combustible, etc.). Después de cierto tiempo, si el objetivo no había sido logrado, Estados Unidos usaba el ataque militar directo.

ESTADOS UNIDOS DECIDE DESESTABILIZAR A PANAMA

El 10 de diciembre de 1985, el director del Consejo de Seguridad Nacional, el vice-almirante John Poindexter, presionó en Panamá al general Manuel Antonio Noriega (1) para que las Fuerzas de Defensa iniciaran un ataque a Nicaragua; (2) para que autorizara la presencia militar estadounidense después del 31 de diciembre de 1999 y (3) para que Panamá se sometiera a la política exterior de dicha potencia. El ataque a Nicaragua daría lugar a la invasión a ese país por parte de Estados Unidos "en defensa de Panamá", en virtud del Tratado de Neutralidad. Pero Noriega rechazó las presiones, y Poindexter amenazó al militar panameño, advirtiéndole "que se atuviera a las consecuencias".

Diferentes fuerzas, tanto en Estados Unidos como en Panamá, convergieron en un plan para desestabilizar a Panamá. El expresidente Nicolás Ardito Barletta, quien había sido derrocado en septiembre de 1985 por haber designado a una comisión investigadora del crimen del doctor Hugo Spadafora, inició gestiones contra Noriega para recuperar el poder y, según autores norteamericanos, contrató a Norman Bailey, agente financiero de la CIA. El senador Jesse Helms organizó audiencias sobre Panamá, a principios de 1986, para promover un clima contra Panamá, utilizando el asesinato del doctor Hugo Spadafora entre otras alegatos, y buscar la forma de anular los Tratados Torrijos-Carter. 

MEMORANDUM SECRETO Y AGENDA OCULTA

En abril de 1986, el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos emitió directrices (en un memorándum "Secreto" del cual solamente se hicieron siete copias) para organizar una campaña de operaciones psicológicas a gran escala con el fin de desestabilizar a Panamá con el fin de (1) restablecer el control del Canal por parte de Estados Unidos; (2) mantener la ocupación militar después del 2000; (3) eliminar la influencia de Japón en los asuntos del Canal y su posibilidad de construir y controlar uno nuevo, ya fuese al nivel del mar o mediante un tercer juego de esclusas y evitar que el canal cayese en manos de Cuba o la Unión Soviética; y (4) ahuyentar a inversionistas de Oriente para evitar que las áreas revertidas y el futuro canal cayeran en manos posiblemente "enemigas" . 

Como excusa para su intervención (según el memorándum), el gobierno de Estados Unidos utilizaría los "rumores" de corrupción en la cúpula de las Fuerzas de Defensa, particularmente la supuesta participación de Noriega en el narcotráfico y el lavado de dinero.

EU ATIZA A LA OPOSICION Y APLICA SANCIONES

La campaña contra Noriega arreció a partir de junio de 1986, cuando el periodista Seymour Hersch publicó en la primera plana del New York Times un catálogo de todos los "delitos" imputables a Noriega. Años después, este periodista admitió haber reproducido datos de la inteligencia (¿de su amigo Bailey?), sin someterlos a verificación.

Estados Unidos aprovechó al máximo la aspiración de muchos panameños de instaurar un gobierno democráticamente electo y puso en escena una agenda oculta de intervención y agresión. Orientó y estimuló abiertamente toda oposición al régimen, desde la sede de la embajada hasta las instalaciones militares de Estados Unidos a orillas del Canal. Los paros, las protestas, las disensiones, las marchas y manifestaciones sirvieron de mampara a los planes intervencionistas, que incluyeron muchas operaciones encubiertas. El modelo de intervención utilizado en 1986 por Estados Unidos para derrocar a Ferdinand Marcos en Filipinas fue trasplantado a Panamá y ejecutado desde su embajada. La Cruzada Civilista, creada en 1987, contaba con oficinas en Washington. 

En Panamá, el gobierno de Estados Unidos inició sus presiones con la restricción o disminución de la cuota azucarera, consciente de que el presidente Eric Arturo Delvalle (que a la sazón apoyaba a Noriega) era el dueño de uno de los ingenios azucareros más importantes de Panamá. En efecto, Delvalle decidió traicionar a Noriega para no perder sus negocios y se pasó al bando de Estados Unidos, que lo reconoció como legítimo presidente de Panamá, pese a que era un "gobierno fantasma", financiado ilegalmente por Estados Unidos con fondos pertenecientes a la República de Panamá que habían sido congelados en ese país.

A principios de 1988, el presidente Ronald Reagan invocó la Ley de Poderes de Emergencia Económica en tiempo de guerra y declaró al "régimen Noriega-Solís Palma" como "una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos"; aplicó sanciones económicas, comerciales, financieras y monetarias a Panamá; congeló depósitos bancarios de Panamá en Estados Unidos; redujo drásticamente la circulación del dólar; retuvo aviones de la empresa Air Panamá; prohibió a ciudadanos y empresas de Estados Unidos entregar dinero y valores al gobierno panameño y tendió un cerco diplomático para aislar al gobierno panameño y obligar a la renuncia de Noriega como comandante de las Fuerzas de Defensa de Panamá.

El gobierno norteamericano excluyó a Panamá de los beneficios de la Iniciativa de la Cuenca del Caribe, para reducir sus exportaciones; usó el veto contra Panamá en las instituciones internacionales de crédito; suspendió todos los programas de ayuda al desarrollo de Panamá; canceló las donaciones y retuvo todo tipo de pago; entre ellos, los de la Comisión del Canal al gobierno panameño, los servicios públicos como luz, agua y teléfono, así como alquileres de apartamentos y casas.
Simultáneamente, los servicios de inteligencia planificaron y apoyaron la oposición interna a Noriega y las Fuerzas de Defensa, así como al partido gobernante, el P.R.D.; infiltraron las agrupaciones políticas y empresariales; penetraron, socavaron y dividieron a las Fuerzas de Defensa; obtuvieron el apoyo de la alta jerarquía de la iglesia Católica; azuzaron a diversas agrupaciones antimilitaristas y financiaron medios de comunicación, tanto nacionales como extranjeros. Alentaron paros, marchas, piqueteos y huelgas.
Las sanciones económicas hicieron caer el crecimiento económico de Panamá al 0% a finales de 1989.

Luego iniciaron las acusaciones (falsas unas y ciertas otras) contra el general Noriega: narcotraficante, dictador, bisexual, adicto, asesino, pornógrafo, fanático del vudú, la magia negra y la hechicería de todo tipo; violador de prostitutas y niñas; doble espía; agente de la CIA.

Construyeron un cerco diplomático en torno a Panamá mediante presiones a la comunidad internacional para que desconocieran al gobierno panameño, rompieran relaciones diplomáticas, retiraran a sus representantes, suspendieran todo tipo de ayuda y violaran el Derecho Internacional.

A la vez, el gobierno norteamericano inició "negociaciones" con Noriega para sacarlo de las Fuerzas de Defensa "honrosamente", pero con ultimátum: Noriega debía retirarse en la fecha impuesta por Estados Unidos, una condición totalmente inaceptable. Cuando todo fracasó, el Pentágono empezó a aumentar su presencia militar en Panamá de manera inconsulta y arbitraria, de manera escalonada, y en violación a los Tratados Torrijos-Carter que obligaban a la coordinación mediante la Junta Combinada de Defensa. Las tropas se instalaron dentro y fuera de la antigua Zona del Canal y circularon sin obedecer a las leyes nacionales ni a lo pactado en los Tratados.
Realizaron maniobras militares sin la aprobación panameña, muchas de ellas de alta peligrosidad en áreas prohibidas y sin controles de ninguna especie, especialmente dentro de la ciudad de Panamá. Las fuerzas armadas de Estados Unidos tomaron posesión de numerosas instalaciones de servicio público, tales como hidroeléctricas, potabilizadoras, comunicaciones, etc. Profundizando su intervención, aterrizaron en lugares prohibidos; introdujeron vehículos y lanchas artilladas a lo largo y ancho del territorio nacional; sus aviones entraban y salían del espacio aéreo de Panamá sin aprobación ni notificación y en violación del Convenio de Chicago de 1944 y acuerdos aéreos bilaterales.

Finalmente, recurrieron a la provocación abierta a los miembros de las Fuerzas de Defensa: los arrestaron, los atacaron y los insultaron. Sin embargo, las Fuerzas de Defensa tenían instrucciones de no ceder ante las provocaciones norteamericanas, que buscaban el pretexto para invadirnos. Cuando todo lo anterior fracasó, Estados Unidos lanzaron la invasión que destruyó a Panamá en forma genocida.

EU BOICOTEA COMISIÓN TRIPARTITA PARA NUEVO CANAL

El temor a un canal japonés: Preocupación vital para Estados Unidos eran los avances de Japón en Panamá. El general Omar Torrijos había iniciado contactos con los japoneses para realizar estudios de factibilidad de un nuevo Canal o de reformas al viejo y ambos países habían suscrito Declaraciones Conjuntas y otros compromisos. El presidente Reagan se hizo invitar a las negociaciones y participó en la firma de acuerdos tripartitos (EE.UU., Japón, y Panamá) para los estudios de un nuevo Canal. Se creó la Comisión de Estudios de Alternativas al Canal, pero a Estados Unidos sólo le interesaba desviar de su curso las relaciones entre Panamá y Japón, porque, al finalizar el Tratado del Canal el 31 de diciembre de 1999, Panamá tendría exclusiva potestad e independencia para acordar arreglos con cualquier país.
Estados Unidos se dedicó a boicotear a la Comisión Tripartita, y ésta no logró realmente reunirse y desenvolverse como se preveía. El General Manuel Antonio Noriega viajó a Japón a fines de 1986 y fue recibido como un jefe de Estado. Los japoneses confirmaron su interés en construir y financiar un canal al nivel del mar.

El gobierno panameño logró sobrevivir a las sanciones, pero también reprimió las manifestaciones, empeorando su imagen ya bastante deteriorada.

COMANDO SUR ACELERA ESCALADA MILITAR

A lo largo de 1987-1989, Estados Unidos aumentó ilegalmente sus fuerzas militares, sin consultar al gobierno de Panamá y en violación abierta del Tratado del Canal, y Panamá elevó protestas pertinentes en la Organización de Estados Americanos (OEA) y en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que fueron desestimadas rutinariamente con sus bostezos acostumbrados.

Los norteamericanos dejaron de cumplir los Tratados del Canal y anularon en la práctica los mecanismos binacionales establecidos, particularmente la Junta Combinada de Defensa, de la cual se ausentaron para proseguir un curso unilateral predeterminado.

El Comando Sur, cuyo cuartel general estaba localizado en Quarry Heights, condujo entre 1988 y 1989 cientos de operaciones militares por tierra, mar y aire, fuera de las áreas autorizadas y dentro de jurisdicción panameña, sin solicitar la aprobación de Panamá, con el fin de provocar a las Fuerzas de Defensa y a la población.

EE.UU. MANDA ESPIAS Y DONA DIEZ MILLONES A LA OPOSICION

Pese al estado de intervención y agresión, el gobierno panameño organizó elecciones generales en mayo de 1989. Agentes de los servicios de inteligencia de Estados Unidos realizaron intervenciones de variada gama. La más conocida fueron las intervenciones radiofónicas a través de emisoras clandestinas, pero las mismas fueron detectadas, y un norteramericano, Kurt Muse, confesó su participación y declaró que los equipos fueron puestos a su disposición por la CIA. En una de las primeras operaciones de la invasión, Kurt Muse fue liberado de la cárcel Modelo por un equipo "Delta" de fuerzas especiales, que asesinó a sus custodios.

El presidente George Bush, dando seguimiento a la política de Reagan, intervino abiertamente en las elecciones al anunciar que había entregado diez millones de dólares a la oposición, provenientes de las cuentas que el gobierno panameño mantenía en bancos de Estados Unidos y que fueron ilegalmente congeladas desde marzo de 1988. El conteo de votos fue interrumpido, y las elecciones fueron anuladas. Una caravana encabezada por los candidatos de la oposición--monitoreada a cada paso por la inteligencia militar estadounidense--fue violentamente reprimida, y Washington empleó profusamente las imágenes de los ataques a los candidatos de la oposición para desacreditar al gobierno panameño y justificar su escalada intervencionista. 
Miembros de los Batallones de la Dignidad fueron visiblemente los responsables. Sin embargo, algunos de los que estuvieron presentes han indicado a este autor que en dichos ataques participaron personas ajenas a los milicianos que fueron vistos poniéndose y quitándose camisetas de los Batallones.
 
INTERVENCIONES DESDE LA EMBAJADA Y EL COMANDO SUR

A medida que arreciaban las protestas de la oposición también Estados Unidos profundizaba su intervención, al punto de que el propio embajador de esa nación en Panamá, Arthur Davis, y su hija participaron personalmente en muchas de las acciones. Elementos de la embajada norteamericana ayudaron a coordinar muchas de las acciones y estuvieron presentes en marchas y demostraciones. Algunos, como el propio Agregado Militar, por ejemplo, fueron detenidos in fraganti. El propio John Maisto, quien estuvo a cargo de la desestabilización en las Filipinas, fue trasladado a Panamá para aplicar la misma receta. Maisto acaba de ser nombrado Asesor del Jefe del Comando Sur, en vísperas del Plan Colombia. En y desde las bases militares en el Canal se fraguaron numerosas acciones intervencionistas. Incluso el periódico de las fuerzas armadas (Tropic Times) fue empleado permanentemente y de manera ilegal para apoyar la desestabilización. 

El gobierno panameño, a raíz de las sanciones, estaba en la ruina, y la actividad económica se redujo drásticamente. No había dinero para pagar la planilla ni para atender los gastos más elementales. Solamente con la ayuda de algunos países amigos pudo el gobierno del ministro Encargado de la Presidencia, Manuel Solís Palma, sobrevivir a corto plazo. Así, entre paros, demostraciones, falta de liquidez, desesperación y represión, Estados Unidos planificó las acciones militares que fructificaron en la invasión del 20 de diciembre de 1989

El golpe del 3 de octubre y la responsabilidad de EE.UU.

En 1988 se había emitido el Documento de Santa Fe (II), que señalaba la necesidad no sólo de eliminar a Noriega sino de desmantelar las propias Fuerzas de Defensa en su totalidad. En marzo de 1988, un número reducido de oficiales intentó dar un golpe al general Noriega, sin éxito. Más tarde, el 3 de octubre de 1989, otro grupo de oficiales al mando del mayor Moisés Giroldi, apresó a Noriega y se hizo momentáneamente con el poder, pero las fuerzas norteamericanas no intervinieron para apoyar el golpe porque el mismo era perpetrado por fuerzas "torrijistas" dentro de las Fuerzas de Defensa que exigían la salida de las tropas de Estados Unidos el 31 de diciembre de 1999. El golpe a Noriega había sido estrechamente coordinado con el Comando Sur a través de los servicios de inteligencia militar, pero el Pentágono decidió no involucrarse por los motivos señalados. Noriega estaba completamente dominado y sólo se requería que el helicóptero norteamericano, que volaba sobre el Cuartel, descendiera y se llevara al prisionero. Al no atender la solicitud de apoyo del Comando Sur, Estados Unidos debe compartir la responsabilidad por la ejecución de los golpistas. En cambio, el pasado 12 de noviembre, el ex general Marco Cisneros, que coordinó la invasión, mintió al declarar en un programa televisivo sobre la Invasión de Panamá ("Infinito": War Secrets), que el Comando Sur le había "rogado" a Giroldi que le entregaran a Noriega, y que éste se había negado.

OPERACIONES INCUBIERTAS E INTERVENCIONES EXTRATERRITORIALES

Los servicios de inteligencia (CIA, DIA y la inteligencia naval) de Estados Unidos diseñaron varias operaciones encubiertas para eliminar a Noriega, y el FBI autorizó a las fuerzas armadas para arrestar a dirigentes de otros Estados y traerlos ante tribunales de ese país, incluso para asesinarlos, en violación del Derecho Internacional. Se analizó la posibilidad de que Estados Unidos apoyara a una fuerza de panameños y algunos mercenarios para que iniciara ataques a Noriega desde sus bases militares en Panamá. Desde 1989, el Comando Sur había sido designado como el centro para Conflictos de Baja Intensidad en América Latina y, en tal sentido, allí se diseñaron esquemas para violentar radicalmente la estructura social, política y económica de los países escogidos a fin de alinearlos a los intereses de Estados Unidos.
Gran cantidad de oficiales militares de Estados Unidos tejieron una red de espionaje sobre Panamá, que recabó toda la información requerida en caso de invasión: sitios estratégicos y claves, funcionarios importantes, personas peligrosas, direcciones residenciales, teléfonos y faxes, hábitos y rutinas, lugares frecuentados, antecedentes y perfiles políticos, depósitos de armas y municiones, cuarteles y sitios de entrenamiento, cantidad y calidad de armamento, listas de amigos y enemigos, control de comunicaciones e inteligencia, etc. Miles de oficiales y sus familias fueron alojados en hoteles y residencias alquiladas en Panamá, que contribuyeron a levantar planos y crear un sistema operativo. 
La planificación militar incluyó planes de contingencia, y fueron varios los proyectos diseñados en el Pentágono para invadir a Panamá con el fin de "arrestar" a Noriega.

LA INVASION DEL 20 DE DICIEMBRE DE 1989

En vista de que todos los intentos de eliminar a Noriega habían fracasado o bien no eran opciones viables para Estados Unidos, la única superpotencia mundial decidió invadir Panamá el miércoles 20 de diciembre de 1989. La operación era totalmente ilegal: el Secretario General de las Naciones Unidas solamente fue informado el día anterior. A la medianoche, a partir de las 11:30 p.m., fuerzas de tierra, mar y aire convergieron sobre diversos sitios preseleccionados, especialmente las instalaciones de las Fuerzas de Defensa en el Aeropuerto de Punta Paitilla; en el Cuartel Central, ubicado en el populoso barrio de El Chorrillo; en el Cuartel de Tinajitas, del corregimiento de San Miguelito; en Fuerte Cimarrón, sede del Batallón 2000, en Pacora; en el Cuartel de Panamá Viejo; en el Cuartel de Los Pumas, ubicado en el antiguo Aeropuerto de Tocumen; en la Base Militar de Río Hato, antigua base estadounidense, donde se encontraban dos institutos de nivel secundario; en la Base Naval de Coco Solo, en Colón.

Cuando todos dormían o se preparaban para celebrar las navidades, la única superpotencia mundial dejó caer sobre un pequeño y desarmado país toda su potencia de fuego. Estados Unidos sobresaturó, en un desproporcionado ataque a Panamá, el escenario bélico. Los agresores utilizaron naves y aeronaves, vehículos, armas, municiones, equipos y recursos bélicos nunca antes utilizados en combate real. Varios aviones Stealth F-117, invisibles a radares ortodoxos, despegaron desde su base en Nevada, se reabastecieron de combustible en el aire, dejaron caer bombas de 2,000 libras sobre Río Hato y El Chorrillo, y regresaron a su sede. Los Stealth ni siquiera fueron detectados por los radares de Estados Unidos en Panamá, menos por Panamá, que no contaba con radares de ninguna clase.

Helicópteros Apache con la más alta tecnología, el bombardero AC-130 Spectre; vehículos todoterreno Hummer; tanques de asalto Sheridan M-551, vehículos blindados M-113, y tanquetas; ametralladoras de varios calibres; y municiones desconocidas, algunas posiblemente químicas; rayos láser y otras utilerías nuevas como chalecos y cascos especiales, visores nocturnos fueron utilizados contra un país que no poseía fuerza aérea, defensa antiaérea ni artillería pesada.

FUERZAS DE DEFENSA DEBILITADAS Y DIVIDIDAS ANTES DE LA INVASIÓN

A finales de 1989, las Fuerzas de Defensa se encontraban divididas, debilitadas y carentes de comando central efectivo. Meses, semanas, días y horas previas a la invasión, la artillería liviana y otras armas pequeñas fueron retiradas de los cuarteles y sitios designados por órdenes de oficiales panameños que trabajaban para la inteligencia de Estados Unidos. Parte del desarme militar fue responsabilidad del general Noriega, temeroso de un nuevo golpe. Pero la artillería restante fue retirada por artimañas de la inteligencia gringa. Los oficiales del Estado Mayor en su mayoría no presentaron combate, y la poca resistencia de esa entidad estuvo a cargo de tenientes, sargentos, cabos, rasos y simples policías. La mayor resistencia recayó sobre los Batallones de la Dignidad y Codepadis, civiles voluntarios a quienes se les dio un entrenamiento pobre y deficiente.
La invasión del 20 de diciembre fue catalogada como la operación bélica más importante de Estados Unidos después de la guerra de Vietnam.
 
LAS MENTIRAS DE BUSH SOBRE LA INVASION

En la mañana del 21 de diciembre, el presidente Bush explicó las razones de la invasión: para (1) proteger a ciudadanos norteamericanos; (2) salvaguardar los Tratados y proteger el Canal; (3) capturar y conducir a Noriega ante tribunales de Estados Unidos; (4) restaurar la democracia en Panamá. Pero era evidente-como declaró el ex jefe del Comando Sur, Fred Woerner--que ni los tratados ni los ciudadanos estadounidenses corrían peligro alguno. Por otra parte, Estados Unidos no tenía capacidad legal para apresar a Noriega, porque esto no lo permitía ningún tratado o el derecho internacional. Además, como manifestara el ex agente de la CIA, Philip Agee, a raíz de esta invasión, no es política de Estados Unidos intervenir militarmente para restaurar la democracia y, en todo caso, Panamá siempre ha sido dominado por un grupo de familias. Thomas Pickering, embajador de Estados Unidos en las Naciones Unidas, manifestó que su país invadió a Panamá "en defensa propia", porque desde territorio panameño se enviaban drogas a Estados Unidos. Un argumento tan ridículo como inaceptable.
El gobierno norteamericano había invocado, como razón para invadir, que las Fuerzas de Defensa habían "asesinado" a un marino cuando el auto en el que viajaban se encontraba "extraviado". La verdad es otra: el marino y sus acompañantes formaban parte de un equipo de tareas especial perteneciente a la inteligencia naval norteamericana al cual se le había asignado la tarea de provocar abiertamente a los militares panameños para encontrar un pretexto. En un auto alquilado y repleto de armas, los marinos (conocidos como los "hard chargers"), rebasaron un retén de las Fuerzas de Defensa en el perímetro del Cuartel Central; hicieron caso omiso a la señal de alto y dispararon contra el edificio principal, hiriendo a varias personas, entre ellos, a un niño. Los militares panameños respondieron legítimamente al ataque. Sin embargo, la muerte del marino (un colombiano), no fue reportada en Washington conforme a los procedimientos usuales.

El presidente Bush acusó a las Fuerzas de Defensa de haber agredido a un teniente de la marina y de manosear su esposa, detenidos cuando rondaban por el Cuartel Central a la hora del incidente citado. Sin embargo, la Dirección de Relaciones Públicas de la institución negó públicamente al día siguiente haber arrestado a la pareja.. Pero el "incidente" sirvió para enardecer a la opinión pública en Estados Unidos y el extranjero en contra de Noriega.

El presidente Bush dijo que "este presidente" no iba a tolerar el atropello a ciudadanos norteamericanos, mucho menos amenazas a mujeres norteamericanas. Sin embargo, "este presidente" (Chomsky dixit) no hizo ni dijo absolutamente nada cuando varias monjas norteamericanas fueron violadas y asesinadas meses antes en El Salvador o cuando una monja norteamericana (Diana Ortiz), pocas semanas antes de la invasión a Panamá, fue secuestrada, torturada y violada por la policía guatemalteca. "Este presidente" tampoco protestó cuando, el 1' de enero de 1990 (a sólo 10 días de la invasión) dos monjas norteamericanas fueron asesinadas por terroristas organizados por Estados Unidos en Nicaragua, etc., etc.

Las maniobras psicológicas ejecutadas en Panamá bajo los servicios de inteligencia norteamericanos fueron exitosas. Una semana después de la invasión, "los militares norteamericanos enviaron a cientos de especialistas en guerra psicológica a Panamá 'para difundir mensajes de propaganda pronorteamericana por todo el país' en una campaña para 'reforzar la imagen de los Estados Unidos' y 'para imprimir la influencia norteamericana en casi todas las fases del nuevo gobierno', informa la prensa. 'Estos muchachos son...muy sofisticados en los aspectos psicológicos de la guerra-dijo un oficial del ejército. Trabajan en propaganda." 

MORDAZA A LA PRENSA NACIONAL E INTERNACIONAL 

Contrario a Vietnam, la prensa internacional (la de Estados Unidos en particular) no estuvo presente en el escenario porque no se les permitió. Los periodistas fueron retenidos en el Comando Sur en Quarry Heights, y solamente cuando todo hubo terminado y luego de borrar las huellas más importantes de la carnicería, se les llevó en recorridos guiados. Ello impidió que el mundo conociera los crímenes de guerra y otras atrocidades cometidas por las tropas norteamericanas. La prohibición de la prensa internacional fue ordenada por el Secretario de Defensa, Dick Cheney, en violación de reglamentos del Pentágono y la Constitución, por considerar contraproducente su presencia en campos de "batalla" (ecos de Vietnam). Cheney, candidato a la vicepresidencia bajo el joven George Bush, se opuso y se opone a la desclasificación de documentos secretos sobre operaciones militares. ¿Por qué será?
 
CRIMENES DE GUERRA

Considérese, por ejemplo, que Estados Unidos bombardeó áreas densamente pobladas en medio de la oscuridad; que sus tropas combatieron y dispararon indiscriminadamente la mayor parte de las veces; que los aviones erraron frecuentemente sus blancos (los F-117, por ejemplo) y destruyeron objetivos civiles; que miles de residencias fueron incendiadas por militares de Estados Unidos. A raíz de la inexperiencia de muchos soldados jóvenes y de la decisión tomada por el general Maxwell Thurmann (el "loco Max", apodo de Vietnam), quien no escatimó víctimas inocentes, miles de panameños no combatientes sucumbieron: miles de muertos y heridos, muchos de cuyos cadáveres fueron destruidos y desaparecidos para borrar evidencias. Thurman seguía órdenes de otro enloquecido general: Colin Powell, Jefe de la Junta de Jefes de Estado Mayor, cuyos criterios operativos ordenaban sobresaturar con incomparables fuerzas al pequeño Panamá, ordenando arrasar con una capacidad para sobrematar ("overkill") al enemigo. Colin Powell es el candidato para la Secretaría de Estado si gana el joven y analfabeto George W. Bush. 

Las fuerzas norteamericanas penetraron en el principal hospital del país-- el Santo Tomás-- adonde fueron llevadas cientos de víctimas; tomaron control de todas sus, prohibiendo la entrada de algunos médicos por razones políticas y maltratando a otros; retiraron del hospital todos los registros existentes, por lo que no se sabe a ciencia cierta cuántos ni cómo murieron y cuántos quedaron heridos, como tampoco el tipo de armas o municiones utilizadas. La inmensa mayoría de las víctimas la constituían civiles inocentes que no participaban en los combates. Quemados, heridos, cortados, destrozados, carbonizados, muchas murieron víctimas de la barbarie del ejécito más poderoso de la Tierra.
 
ASESINATOS PERPETRADOS POR MILITARES DE EU

Pero existen suficientes testimonios en libros publicados en Panamá y otros países que demuestran no sólo cómo murieron combatientes y civiles inocentes sino que, además, acusan a las fuerzas norteamericanas de cometer crímenes de guerra. Dichas publicaciones nos indican que dichas fuerzas: 

1. Mataron a muchos civiles inocentes en sus residencias. 

2. Mataron a muchos civiles inocentes por la espalda, mientras descendían de sus casas en medio de la oscuridad. 

3. Mataron y remataron a miembros de las Fuerzas de Defensa y de los Batallones de la Dignidad que habían sido heridos previamente. 

4. Impidieron brindar asistencia médica a los heridos en las calles y residencias, dejándolos morir sin remedio. 

5. Mataron a heridos que recibían atención médica en hospitales, clínicas y centros. 

6. Mataron a prisioneros de guerra dentro de centros de retención. 

7. Mataron a combatientes que ya se habían rendido, con las manos en alto, luego de dárseles garantía de respetarles la vida.
8. Mataron a muchos civiles inocentes, atrapados en sus autos, que fueron aplastados por tanques y tanquetas de las fuerzas invasoras. 

9. Mataron a muchos soldados y policías mientras dormían y que no presentaron combate, sin dárseles oportunidad de rendirse. 

10. Mataron a mujeres después de violarlas. 

11. Mataron a muchas personas por simple sospecha o nerviosismo. 

12. Mataron a muchas personas dentro de sus autos porque se salieron de la fila en los retenes; porque los agresores se pusieron nerviosos; porque tuvieron "problemas de comunicación"; porque no hicieron un alto o no cumplieron órdenes "en inglés".
13. Mataron a muchas personas por "error" o por simples ganas de matar, sin explicación ni justificación.
14. Maltrataron, golpearon y torturaron a prisioneros de guerra.

A los anteriores asesinatos, considerados como los más graves crímenes de guerra según los tratados internacionales, habría que añadir otros que tampoco son justificables ni perdonables. Los hechos demuestran que las fuerzas invasoras destruyeron miles de viviendas de gente humilde, que quedó en total desamparo. Cientos de personas sufren aún severos traumas psicológicos y fisiológicos que las han inhabilitado, al punto de que quedaron incapacitadas. Muchos embarazos fueron malogrados. Miles de hijos de las víctimas sufren el síndrome de la desintegración familiar por la desaparición de quienes constituían el sustento en el hogar y muchos son ahora delincuentes por esa razón. 

Las fuerzas invasoras destruyeron numerosos edificios e instalaciones civiles y equipos pertenecientes al Estado y al pueblo panameños, cuyo valor alcanza quizás miles de millones de dólares. Las fuerzas invasoras se llevaron valiosos botines de guerra, desde las armas y equipos de las Fuerzas de Defensa-muchos de estos nuevos-hasta las armas del "Pía Vesta" y las computadoras del G-2 de esta institución. Las fuerzas invasoras incautaron miles de cajas llenas de documentos. Saquearon muchas riquezas del país, como piezas arqueológicas ireemplazables, joyas precolombinas, tesoros artísticos. Se llevaron la primera bandera nacional. Existen testimonios de personas a quienes las tropas norteamericanas despojaron de joyas, dinero y pertenencias de todo tipo, aparte de que les dejaron enormes cuentas en llamadas de larga distancia a Estados Unidos.

Miles de personas no combatientes fueron arrestadas y retenidas en campos de concentración durante largos períodos de tiempo tan sólo por el hecho de pertenecer al partido político gobernante, por ser funcionarios del gobierno, por simple sospecha o necesidad de prevención o por puro terrorismo de Estado, sin que hubiesen formalmente cargos contra estas personas.

Todos los medios de comunicación (prensa, radio y televisión)--salvo los colaboradores-- fueron intervenidos por las fuerzas invasoras y sometidas a estricta censura, y la totalidad del país fue sometida a un régimen de ocupación violatorio del Derecho Internacional.
Las fuerzas norteamericanas cercaron las embajadas de Cuba y Libia y penetraron en la residencia del embajador de Nicaragua; atropellaron a diplomáticos deesos países, en flagrante violación de la inmunidad diplomática y el derecho de asilo.
 
NUEVO GOBIERNO TOMA POSESION EN UNA BASE GRINGA 

Un gobierno, integrado por la oposición a Noriega y que reclamó el poder, fue juramentado en una base militar norteamericana horas antes del inicio de la invasión. Dicho régimen de facto fue instalado y protegido por varios años por las fuerzas invasoras, a pesar de que todo ello constituía una descarada violación de la Carta de la Organización de Estados Americanos (O.E.A.), de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y del Derecho Internacional.

A raíz de la agresión, tanto la O.E.A. como la Asamblea General de la ONU condenaron la invasión e instaron a las fuerzas de Estados Unidos a retirarse de Panamá inmediatamente, lo cual, por supuesto, no ocurrió, y urgieron a los panameños a ponerse de acuerdo para llamar a nuevas elecciones bajo supervisión internacional, lo que, por supuesto, tampoco se llevó a cabo por la prepotencia del gobierno de Estados Unidos. Inglaterra y Canadá votaron a favor de la invasión, y otros tantos se abstuvieron. En el Consejo de Seguridad, la resolución que condenaba la invasión recibió el triple veto de E.U., Inglaterra y Francia (miembros de la OTAN). El Salvador fue el único país de Latinoamérica que votó en contra de la resolución que condenaba la invasión. ¿Por qué habra sido?

Haciendo gala de su control sobre los medios de comunicación internacionales, Estados Unidos propaló la versión de que no hubo muchas víctimas inocentes ni daños colaterales que lamentar. Se capturó a Noriega y con ello-dijeron--se dio un golpe certero a los narcotraficantes. Pero, el narcotráfico aumentó, al igual que el consumo del drogas ilícitas en Panamá. 
Durante los dos años que duró el estado de ocupación, ocurrieron muchos incidentes violatorios de los derechos humanos de la población y aumentó el tráfico y el consumo de drogas en Panamá, que era mucho menor antes. Noriega fue condenado a 40 años de prisión luego de un juicio ilegal en muchos aspectos que careció de evidencias sólidas. Carlos Lehder, quien declaró contra Noriega a cambio de una reducción en su pena, después se retractó admitiendo que había mentido. Ricardo Bilonick, el "testigo dinamita" que decían tener los fiscales contra Noriega, lo consiguieron mediante un trato con el Cartel de Cali, que primeramente amenazó a Bilonick y luego lo compró por cientos de miles de dólares a cambio de un "favor" que Estados Unidos le hizo a dicho Cartel.
En agosto de 2000, los capos del Cartel de Medellín declararon en Colombia que Noriega realmente nunca permitió el uso de Panamá como puente del narcotráfico, aunque sí toleró el lavado de dinero, contradiciendo la propaganda de guerra y las acusaciones de Estados Unidos.
En la invasión hubo muchas más víctimas que en la Plaza de Tiennamen y que en el derrocamiento de Ceausescu en Rumania. Sin embargo, mientras miles de panameños morían y el resto veía la destrucción de su soberanía y de su país, ninguno de los crímenes cometidos por la más grande "democracia" del mundo en Panamá aparecieron en las pantallas de los televisores del "mundo libre", concentrados en las "atrocidades" de "tiranos comunistas"!

Como fruto de la invasión, Japón disminuyó su presencia bancaria y financiera y sus inversiones en Panamá de manera drástica, y su influencia en la Comisión Tripartita para el Estudio de las Alternativas al Canal decreció de manera significativa. En la década de los noventa no se ha mencionado la participación de Japón en el nuevo Canal.
PERSPECTIVAS, ONCE AÑOS DESPUES
La decisión de desestabilizar a Panamá data de fines de 1985, pero la orden fue dada en el Consejo de Seguridad Nacional norteamericano en la primera semana de abril de 1986. Tanto las agresiones e intervenciones anteriores al 20 de diciembre como la invasión de esta fecha no han sido castigadas como lo exigen la Carta de las Naciones Unidas, tratados internacionales que rigen la materia y el Derecho Internacional, y han quedado impunes, a pesar de que Estados Unidos es responsable de numerosos crímenes de guerra y debe indemnizar a Panamá por la totalidad de los daños.

Ningún gobierno "panameño" ha tenido siquiera el interés de crear una comisión que investigue los diversos aspectos de la invasión. No sabemos cuántos muertos, heridos y desaparecidos ocasionó la invasión. No ha habido una reclamación oficial al gobierno de Estados Unidos por la destrucción de la economía y de propiedad nacional y estatal, mucho menos por las víctimas. Ni siquiera se han atrevido a declarar el 20 de diciembre como Día de Duelo Nacional. Ninguno de los partidos políticos ha querido arriesgar su futuro revolviendo este tema, pero este hecho vergonzoso significa que los partidos y sus líderes no representan ni defienden a la nación panameña. Exijamos, pues, la constitución de una Comisión de Investigación sobre la Invasión a Panamá y una Comisión de Reclamaciones al gobierno de Estados Unidos que determine la responsabilidad legal y y la cuantía financiera de la indemnización. 


Al parecer, la clase política panameña carece de decoro. "Ver un crimen en silencio es cometerlo," dijo José Martí.
Julio Yao en el centro a medio rostro Laguna y yo


no deje de darle una miradita a los documentos de este blog:

miércoles, 16 de agosto de 2017

Noriega, el patriota. ¿Será un cuento surrealista?

General Noriega, ¡EL PATRIOTA!    
¿Será un cuento surrealista?
Por: Moisés Pinzón Martínez
ISBN: 978-9962-12-739-0

ÍNDICE
1.- Introducción
2.- Antecedentes
    2.1.- Jimmy Carter
    2 2.- Demonios del averno
3.- Más antecedentes
4.- Los hechos
5.- Revolución Torrijista
6.- Repliegue
7.- Invasión
8.- Al cierre


1.- INTRODUCCIÓN

Primeramente es necesario señalar, el que escribe este análisis fue encarcelado y perseguido económicamente (en los años siguientes) en 1985 en el gobierno del General objeto de este ensayo, por su participación en la Huelga Nacional en defensa de las conquistas del Código de Trabajo (*1); y parece ser, por lo que me enteré años más tarde,  que la intención era desaparecerme.  Indicando que este estudio podría no estar sesgado por oportunismo o favoritismo alguno.

Por otra parte, no es posible hacer ningún análisis al respecto de las personas que representan sectores de clases sociales, participantes en este periodo, sin que sean determinados sus visiones e intereses con respecto al Canal Interoceánico y la nación panameña en contraposición a los intereses del imperio norteamericano.

En otras ocasiones hemos expresado que en nuestro país, y en el resto de nuestra sufrida he históricamente saqueada Suramérica, no es posible hacer ningún análisis político -con algún grado de acierto- sin antes ubicar con precisión cuál es la estrategia y la táctica imperial. Las Embajadas de los Estados Unidos de Norteamérica, en todo el mundo, son centros dinámicos y extremadamente activos de las más viles intervenciones; desde la promoción y encubrimiento a narcos, paramilitares y terroristas, pasando por el asesinato de dirigentes políticos,  hasta el financiamiento de amplias redes de organizaciones y personas para que pongan en práctica sus mandatos, convirtiéndolos en TRAIDORES a la patria; ni que decir, de periodistas y medios de comunicación.

Esta política intervencionista, sanguinaria y despojo de los recursos naturales, en el siglo pasado plagó de dictaduras a nuestra América del Sur, con sus consecuencias de cientos de miles,  millones de muertos, desaparecidos, refugiados,  etc.  En Panamá (país que llegara a tener su primer millón de habitantes en 1960 a tan solo 4 años de los sucesos del 9 de Enero, cuando este pueblo se enfrenta heroicamente al ejército más poderoso de la historia; y cuando a la firma de los tratados Torrijos-Carter la población  no alcanzaba ni los dos millones) esta política criminal de intervención "diplomática" deja muchas preguntas cuyas respuestas son muy complicadas, algunas de las cuales trataremos de abordarlas en éste documento. En este entorno increíblemente imbricado nos encontramos en 1968 con el egresado del Instituto Nacional y ahora Capitán, Manuel Antonio Noriega.

2.- ANTECEDENTES

2.1.- Jimmy Carter

El que una persona actúe en función de valores humanos obtenidos en su infancia a través de la religión y la familia;  valores construidos por la humanidad a través de los siglos y milenien;  valores tales como que es pecado mentir, desear la mujer del prójimo, robar, etc.; el que esa persona heredara millones de dólares y mantuviera dichos valores, es ya la materialización de lo imposible.  Pero que esa persona,  además, llegara a la Presidencia del país más poderoso del mundo y de la historia, el país donde gobiernan Alíbaba "junto" a los 40 ladrones, es una realidad única en la historia ... representa la reencarnación de la fe humana que se hace carne en la persona de Jimmy Carter; el que estuvo en ese puesto de inmenso poder desde el 20 de enero de 1977 hasta el 20 de enero de 1981,  justo en el momento en que los planetas se alinearon en favor de Panamá.

Los tratados Torrijos-Carter, que representaron en primera instancia un eslabón determinante de dignidad y unificación de la nación panameña, y luego determinara su progreso económico,  se firmaron el 7 de septiembre de 1977.  El significado en la gestión de los tratados del Presidente Carter (Partido Demócrata) fue monumental, aunque solo fuese en el último brinco; porque los Presidentes Republicanos que le antecedieron (Ford y Nixon) discutieron estos tratados a rempujones (*2),  no tenían la más mínima intensión de llevarlos hasta sus últimas consecuencias, como lo demostraría la feroz oposición que el Partido Republicano realizada antes y después de su firma, tanto en los EEUU como en Panamá. Entre enero a septiembre de 1977 estuvieron plagadas de todo tipo de conspiraciones provocadas por el Partido Republicano para evitar el pacto;  y luego de firmados se requería de un referéndum por parte del pueblo panameño y de una aprobación por parte del Senado norteamericano,  dos eventos en donde nuevamente el Partido Republicano pasa a conspirar con todo lo que tuvieran a su alcance. El Referéndum en Panamá se efectuó el 23 de octubre de 1977 y la votación aprobatoria en el Senado, la que debían ser por "dos tercios", se realiza el 18 de abril de 1978. Los republicanos aunque mantenían limitado poder en el Senado no dejaban de ser determinantes tanto en su país imperial como a nivel internacional. (*3)

El que una persona con tantas cualidades humanas lograra llegar a la Presidencia del Imperio,  obedeció principalmente a la oposición de la población trabajadora estadounidense a la guerra de Vietnam; donde murieron más gringos que en toda la II Guerra Mundial; en donde el ejército norteamericano quedó a la vista del mundo entero su carácter genocida, su papel de gendarme represivo de los intereses del gran capital y las transnacionales; diametralmente distintos a los intereses de los obreros y trabajadores norteamericanos que son los que ponen los muertos,  mutilados, prisioneros, desquiciados, etc. Quisieron convertir una nación en cenizas y las cenizas los devoraron a ellos.

Fue tan atroz la destrucción general, genocidio y crímenes cometidos por el ejército gringo a la población vietnamita y tan significativo sus continuas derrotas, que no pudieron ocultarle a su población, ni al mundo, el verdadero carácter de rapiñería imperial de la guerra. Hoy, su papel intervencionista es tan evidente, todo el mundo lo sabe, que la lucha ideológica del imperio está enmarcada en convencer al mundo, a través de múltiples formas, entre ellas miles de películas televisivas, de que es necesario para el bienestar económico, las libertades,  la democracia,  etc.,  el que ellos puedan entrar y salir de cualquier país haciendo lo que les da la gana.

Y entre las feroces luchas por la emancipación de los negros,  donde entre tantos es asesinado Martin Luther King el 4 de abril de 1968 (por los mismos sectores guerreristas del imperio enquistados fundamentalmente en el Partido Republicano,  los que pudieron -igual que a Torrijos- asesinar su cuerpo mas no "su sueño") y el repudio mundial al papel sanguinario del ejército estadounidense en ese pequeño país asiático de campesinos, que de las entrañas del sistema capitalista putrefacto, surge una luz clara y diáfana llamado Jimmy Carter; el que de inmediato estableció una relación de amistad sin hipocresias con el General Torrijos que facilitarían el milagro de los, tratados Torrijos-Carter.

Milagro que no fue para nada gratis, detrás de él se conjugaron cientos de astutas estrategias y tácticas por parte de los dirigentes panameños que enfrentaron y derrotaron a cientos de igualmente pertinaces estrategias que la reacción, los sectores retrogradas gringos, en concubinato con sus homólogos panameños, diseñaran develados esfuerzos por mantener su preciada posición estratégica sobre Panamá, dirigidos por De Consini y Reagan en el Congreso y Senado de EEUU.

 Al final, con el concurso del mundo entero, sin excepción alguna, producto del brillante liderazgo del General Omar Torrijos Herrera, son firmados los tratados.

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(*1) Huelga Nacional convocada por los trabajadores organizados en CONATO (Consejo Nacional de Trabajadores Organizados) para rechazar las intenciones del nuevo Gobierno de Niky Barleta,  presidente propuesto por la Embajada gringa,  de reformar el Código de Trabajo. Este Código fue una conquista de los trabajadores, obtenida en 1972,  que el propio General Torrijos entregara haciendo un enérgico llamado a que lo defendiéramos.
(*2) Richard Nixon,  es Presidente de EEUU desde el 20 de enero de 1969 hasta el 9 de agosto de 1974, luego de su renuncia por el escándalo de "Watergate" gobierna su Vicepresidente Ford hasta el 20 de enero de 1977. En ese período fue puesto en ejecución el "Plan Cóndor" con el cual promueven el derrocamiento de gobiernos democráticos a la vez que consolidan y plagan de dictaduras neofascistas por toda la América Latina. Panamá fue la única excepción de la regla, aquí la dictadura se convirtió en una revolución; a la que combatieron con todo lo que tenían desde aquel 15 de diciembre de 1969 cuando propician el derrocamiento fallido del General Torrijos.
(*3) Tanto el Partido Demócrata como el Republicano mantienen funcionando fuertes organizaciones sociales y políticas en todo momento, incluyendo cuando no están en el control del poder, a través de ONGs las que ejercen una enorme influencia tanto en su país como a nivel internacional.

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2.2.- Demonios del averno          

Los sectores más reaccionarios del imperio, sin lugar a dudarlo, pelearían hasta sus últimas consecuencias, para revertir,  anular, mediatizar, esos tratados, cada año hasta el último día del 31 de diciembre de 1999, fecha en que se entregaría totalmente la vía interoceánica a los panameños. Su condición de ser una de las dos vías marítimas más  importantes del mundo, lo convierten en punto estratégico de fundamental importancia para la visión geopolítica de agresión y usurpación de los gobiernos de #USAlaViolencia; gobiernos escogidos por los trabajadores norteamericanos pero que están al servicio de las transnacionales y del gran capital. Gobiernos que igual al Imperio Romano,  último defensor del Sistema Esclavista, son, dos mil años después, el último baluarte del Sistema Capitalista.

Desde el mismo día 18 de abril de 1978, cuando pierden en el Senado por escasos "un voto" el rechazo de los mencionados tratados, comenzaron a planear la estrategia para revertirlos; dado que tenían como máximo hasta 23 años para tal fin.

La votación, como ya hemos mencionado, requería de dos tercios de los Senadores para ser aprobados; consiguiéndose 68 votos a favor de los tratados Torrijos-Carter y 32 en contra. Un solo voto fue el que marcó la diferencia histórica; y que además, esa imperceptible diferencia define, casi sin ser notado, las increíbles dificultades que la mayoría del pueblo panameño, bajo el liderazgo de Omar Torrijos Herrera, tuvieron que sortear por 10 años de lucha. 10 años que representaron el epílogo de esta génesis que representó la fase inicial de la construcción de la nacionalidad panameña.(*4)

El que fuese el Partido Demócrata el que prohijara los tratados Torrijos-Carter no representa su verdadero carácter de representantes de la clase opresora de Estados Unidos y del Mundo,  son el lobo vestido de oveja; a diferencia de su contraparte,  el Republicano,  que son el lobo feroz al desnudo. Sucedió, como ya hemos analizado, que los planetas se alinearon para que los demonios del averno se ocultaran y dieran paso a la luz dirigida por dos ángeles celestiales, Torrijos y Carter. Claro,  quedaron dráculas tanto en el Senado y las elites de poder gringa como entre los políticos panameños que mancomunadamente trataron de evitar a toda costa dichos resultados... pero fueron derrotados una y otra vez. Igualmente en los siguientes años éstos mismos sanguinarios y apátridas seguirían conspirando para evitar su cumplimiento.

Es importante señalar que la gran masa que siguió a los dirigentes apátridas y que votara "no" a los tratados en el referéndum del 23 de octubre de 1977,  actuaron confundidos en su mayoría. Igualmente la gran masa  que apoyara a los dirigentes que confrontaron a Noriega, actuaban sobre bases de sustentación que tenían sentido, pero ignoraban la verdadera intención de sus dirigentes. Veamos dos ejemplos de esas verdaderas intenciones: 1.- Al diario Critica los bancos le tenían un embargo, Torrijos paga la deuda y lo convierte en un periódico del sistema de Empresas Estatales (ERSA), lo amplia, moderniza,  etc, etc. Pasada la invasión, en sus primeras semanas, se lo regresan GRATIS a sus antiguos dueños oligarcas y no suficiente, le entregan una indemnización millonaria. 2.- Firman con los gringos un "Acuerdo Presidencial" de venta de las empresas estatales. Gracias a Dios, solo pudieron vender la más pequeña; de lo contrario lo hubiesen hecho como sea y fumigado los dineros entre ellos; dejando al pueblo, como siempre, con las migajas. Muy distinto a lo que hiciese el gobierno P.R.D., el que ganara las elecciones en 1994; el Presidente Ernesto Pérez Balladares, obligado por dicho acuerdo, las sanea para obtener el mejor beneficio, las promueve a nivel mundial (para que no fueran empresas de un solo país las proponentes, asegurando o evitando el chantaje que ocurre cuando un Estado determinado controla la economía de otro) y crea el Fondo Fiduciario, del cual todavía hoy gozamos de sus beneficios. ¡Ah! Algo más,  solo vende el 49% de las acciones, asegurándose para el Estado y los empleados el resto. Estas son algunas de las razones por la que #USAlaViolencia le quita, hasta el sol de hoy, la visa al Presidente Balladares; ellos esperaban comprarlas todas a precios ridículos; solo se quedaron con el ferrocarril que ellos mismos habían destruido antes de regresarlo como producto de los tratados.

Pasado este periodo luminoso del Presidente Carter,  gana las elecciones de E.E.U.U. el Partido Republicano; Ronald Reagan asume el cargo presidencial el 20 de enero de 1981. Desde esa fecha, la absoluta oscuridad se cernirá sobre la humanidad en los próximos 16 años. Rápidamente los Demócratas, que habían cumplido un gran papel histórico progresista en ese corto período, pasan a darse golpes de pecho de arrepentimiento al ser sometidos ante las embestidas brutalizantes de Rambo.

El nuevo gobierno convierte el objetivo estratégico de desestabilizar el país canalero,  colocar un gobierno dócil a sus intereses y renegociar los Tratados, como una de sus prioridades.

Pasaron tan solo 6 meses del mandato del delincuente internacional de Reagan, ya aprobada dicha estrategia, asesinan al General Torrijos con un artefacto explosivo que le colocaron a su avión el 31 de julio de 1981, mientras viajaba a Coclecito, a las 10 de la mañana quedó su cuerpo esparcido en mil pedazos en las laderas de cerro Marta. Con este acto de magnicidio, uno de los tantos que han ejecutado y promovido los gobiernos de Estados Unidos en el mundo, se da inicio al proceso de desmantelamiento de los liderazgos panameños en todos los planos y niveles.

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(*4) Con la firma de los Tratados Torrijos-Carter el 7 de septiembre de 1977, se concluye un largo periodo de conformación de la nacionalidad panameña, que podríamos decir se inicia con nuestra independencia de España el 28 de noviembre de 1821. Luego de firmados se da inicio a otro periodo en donde se debe consolidar dicha nacionalidad, época ésta que se logra con la entrega definitiva del Canal a la Administración completa de los panameños el 31 de diciembre de 1999.  Lo que se empieza a construir a partir de esta fecha es nuestra Liberación Social; donde la clase trabajadora asumirá su papel protagónico.
En cuanto al Canal, la estrategia de los gringos y apátridas neo-oligarcas (lastimosamente con el silencio cómplice del PRD) consiste en deteriorar la capacidad laboral en el canal para así justificar su privatización; como efectivamente ya están actuando con las tercerizaciones.


3/8..... Noriega el patriota, será un cuento surrealista... 3/8

3.- MÁS ANTECEDENTES  

Escribimos en el libro "El diputado" que "la política es la  expresión más  evolucionada del  ser humano en una sociedad dada y su realidad está determinada por la  acción de los  individuos más  representativos y sensibilizados ante  los problemas y objetivos de su  sector, en la lucha por el control del gobierno del Estado,  de cara a influir y determinar su  rumbo." Ahora bien,  ¿cuál ha sido el rumbo de los gobiernos a lo largo de la historia hasta la aparición en 1917 del primer Gobierno dirigido por los trabajadores,  materializado en Rusia? De por si, no ha sido otro que el robo, el pillaje, corrupción, la explotación inmisericorde del trabajo; la dominación y usurpación, por diferentes vías y formas, de las riquezas de las naciones menos desarrolladas, represión sin piedad de las exigencias de las grandes masas de la población,  etc. Todo esto y mucho más, que igualmente se ocultaba en el pasado, ya hoy es de todo el mundo conocida.

Ya hoy, la clase social en el control de los gobiernos del capitalismo salvaje, entienden que no ganan nada ocultando la realidad de opresión que representan ni mucho menos las teorías científicas que lo develan,  tal como lo hacían en el pasado; por tal motivo se dedican a tergiversarlas de muchas formas,  pongamos algunos ejemplos:

1.- Presentan por Tv a Negros jefaturando blancos en la época de la esclavitud o de la emancipación en Estados Unidos. Tal es la intensidad de la mentira, que recientemente le vendieron al electorado norteamericano a un Presidente negro con sangre blanca; e igual que los capataces, fue más fulo que los mismos fulos.
2.- Crean programas donde justifican que los organismos de inteligencia y el ejército imperial tienen derecho divino de entrar a cualquier país u hogar del mundo asesinando niños, mujeres, ancianos, metiéndose en la vida privada (tal como sucediera con los presidentes de Francia y Alemania, que se la calaron) para garantizar la paz, las libertades y bienestar económico de la población; cuando es todo lo contrario como profetizara Simón Bolívar que los Estados Unidos estaba llamado a plagar de miseria el continente (*5);...etc.
3.- Nos repiten una y otra vez sobre la necesidad de que ellos (los burgueses) se apropien de la plusvalía para que exista desarrollo; cuando más del 80% de la producción en el mundo está "socializada", lo que demuestra su total parasitismo. "Socializada" quiere decir que todas las instancias de la producción, incluyendo las investigaciones científicas, están dirigidas y administradas por empleados; los dueños o capitalistas, que antes cumplían una función social de relevante importancia, ya hoy son parásitos dedicados a la inversión accionaria, desconociendo totalmente los procesos productivos de las empresas que lucran.
4.- Niegan que los gobiernos populares e incluyentes sean democráticos; ni mucho menos que están en capacidad de gobernar; cuando éstos han ganado mayoritariamente las elecciones, tal cual sucede en la República Bolivariana de Venezuela cuyo gobierno ha triunfado en 18 de las 20 elecciones realizadas en los 18 años del proceso revolucionario que en ese país se desarrolla; etc.  En el caso de Panamá,  nunca aceptaron como democrático la escogencia por Corregimientos de un Representante por la vía del voto directo de los parroquianos para que éstos decidieran en Asamblea los destinos de la nación; al final, fue la Asamblea de Representantes de Corregimientos (505) los que se convirtieron en el baluarte político que viabilizó y fue la principal fortaleza de contención a las múltiples conspiraciones realizadas por el imperio en las negociaciones de los tratados, cuyos beneficios hoy gozan los que ayer fueron un obstáculo. Tratan a la mayoría de la población de ignorantes señalando que no son capaces de saber la diferencia de un gobierno populista, los que como tal NO EXISTEN, y los democráticos; o la diferencia entre el bien y el mal.

Por otra parte, los intereses económicos que se ventilan en la lucha por el poder son tan grandes, que para nadie es un secreto que dicha lucha es feroz e implica en frecuentes coyunturas la posibilidad real de morir en ella. Eso es un hecho de todos conocidos. No obstante, no es cierto que sea lo mismo uno o varios muerto en determinadas circunstancias que cien,  miles,  decenas de miles de asesinados. No es lo mismo cuando se muere en combate que cuando te sacan de la casa y te asesinan o ametrallan manifestaciones.  Veamos algún ejemplo: No es lo mismo los 25 millones de rusos que perecieron en la II Guerra Mundial,  que las 500 mil bajas que tuvo el ejército norteamericano; escribo esto porque una y otra vez no dejan los gringos de darse bombos de que fueron ellos los que derrotaron el fascismos... O el caso de Colombia donde en nombre de la "democracia", en la década del 80 del siglo pasado (hace tan solo 27 años), asesinaran "selectivamente" a más de 5,000 dirigentes populares; siendo este uno de los cientos de ejemplos parecidos que se pueden anotar de ese desgraciado país, desgarrado por la burguesía más represiva y lambegringos de América. No es lo mismo el asesinato selectivo de Rodolfo Aguilar Delgado (dirigente de las Bananeras) y Juan Navas (dirigente estudiantil); que los héroes que mueren en combate en la guerrilla arnulfista.

Todos sabemos que la participación directa en los avatares de la política, no importando en que trinchera sea,  implica riesgos y peligros de todo tipo, incluso el perder la vida. En este plano de la actividad humana,  NO HAY INGENUOS.

En el periodo inicial de la revolución torrijista,  la naturaleza del Golpe de Estado que se le realizara a Arnulfo Arias, el 11 de Octubre de 1968, fue fascista, avalado por #USAlaViolencia ... : Los Partidos Políticos fueron prohibidos,  se cerró la universidad por un año, se disolvió la Asamblea de Diputados, detuvieron y exiliaron a los dirigentes comunistas (Partido del Pueblo)...etc., etc. Sin la más mínima duda, tengo que reconocer el valiente papel que desempeñaron los Arnulfistas (hoy,  Partido Panameñista) en defensa de la democracia al organizar un levantamiento armado de carácter guerrillero en donde mueren decenas de patriotas principalmente en Cerro Candela.

El intenso grado de respuesta y sacrificio efectivo de los distintos sectores políticos al golpe militar, posibilitó que el entonces Teniente Coronel Torrijos pudiera apartar del Gobierno Provisional a los dirigentes militares y civiles que representaban una visión Fascista sobre el qué hacer. No obstante, por la naturaleza de las circunstancias en la recomposición de objetivos, fuerzas sociales y políticas del nuevo gobierno, los arnulfistas no participaron; en su evolución el proceso revolucionario torrijista pudo rescatar a grandes sectores de la dirigencia de esa tendencia política, en ese entonces de carácter populista.

Es importante señalar que el oficial militar de más alto rango que se suponía respondía al Pentágono, lo era Torrijos; además de ser uno de los cinco oficiales mejor preparados por la Escuela de las Américas en la región; esto le granjeaba un enorme prestigio tanto a lo interno de la policía como a nivel internacional. Ya en ejercicio de su poder político, se opone a los tratados Tres en Uno y a los lineamientos señalados por la Embajada norteamericana, por lo que acabaron organizando el golpe que se le propinaría en diciembre de 1969; en el mismo,  el entonces Mayor Manuel Antonio Noriega tuvo un papel de primera orden en el retorno del General Torrijos al país. Obsérvese que, uno más que el otro, estaban vinculados a la CIA (Central de Inteligencia imperial).

El sentimiento patriótico de la inmensa mayoria del pueblo panameño, producidos por la segregación general existente y sus consecuencias de prepotencia, humillación, sometimiento, usurpación, etc., era tal,  que incluso sus aliados (comprados), tras bastidores, despotricaban todo tipo de maldiciones hacia los gringos. Factor éste fundamental para entender lo incomprensible.

Dada esta realidad de masivo sentimiento antiimperialista, a lo largo del proceso revolucionario de descolonización, para dividir a los panameños y evitar la firma de los tratados, y luego para tratar de renegociarlos, la táctica que utilizara el imperio era la de exacerbar los errores naturales y obligados del acontecer diario, para tratar de colocar al frente del Gobierno a dirigentes abyectos a la Casa Blanca. Evidentemente con la intención de: antes de la firma de los tratados cambiar su carácter; y luego de ella, adaptarlos a sus intereses;  todo ello en secreto,  como hiciesen en 1990 con el "buneralazo" tratado Salas-Backer o las bases que a espaldas de la opinión pública mantienen en Darién.

En ese sentido, antes de la firma de los tratados usaban los argumentos, todos diseñados en el Pentágono y puestos a correr entre los panameños por sus agente, que como ya hemos señalado, vinculados al abanicamiento de los errores naturales de todo tipo -incluso personales y de liderazgos- atrapando la emoción de grandes sectores de la población;  argumentos tales como:
1.- Los panameños no estábamos preparados para administrar el Canal,  cuando ya más del 80% de la fuerza laboral eran panameños en todas las instancias.
2.- Que al irse el ejército del país, dejaríamos de recibir sus supuestos millones de dólares que traían a la ciudad; puntualizando que "con soberanía no se come". Empero, aunque para nosotros SI era un problema de dignidad y soberanía de principio y en principio, ellos tenían en el "Enclave Colonial" todo lo necesario para no salir de él para nada; lo que traían era para promover la prostitución, alcohol, drogas... corrupción, etc. No obstante,, en la sumatoria de ingresos, multipliquemos un millón doscientos mil dólares, que era lo que recibíamos de anualidad por el usufructo de nuestra privilegiada posición geográfica, por 75 años -entre 1903 a 1979 cuando los Tratados Torrijos-Carter inician- (y sabemos que no es así, dado que originalmente recibíamos 250,000 dólares oro,  luego 450,000 y no fue hasta la década del 50 que conseguimos ese 1.2 millones de dólares al año) nos dará una ridícula cifra de 90 millones de dólares. Sumemos la cantidad que se nos dé la gana, entre prostitutas, alcohol, drogas, etc. o la que ilusionemos ... y jamás esa cantidad imaginaria, más los 90 millones en 75 años, será algo más que limosnas.  Sintetizando cifras, nos da que en 75 años de administración gringa sobre el Canal, éste le rindió a la economía panameña 90 millones de dólares; en cambio, desde que Panamá administra la vía, a partir del 31 de diciembre de 1999, hemos recibido 10,665 millones en tan solo 15 años. Es obligado resaltar que, aun así,  Torrijos desde el inicio de las negociaciones  nunca quiso discutir el tema en términos de las remuneraciones como lo intentaron muchas veces los negociadores norteamericanos.
3.- Ya próxima la fecha de la firma de los documentos,  ventilaron el argumento de cuestionar los 23 años de transición por la de entrega del Canal de inmediato; argumento que aun siendo totalmente valedero, era inconsistente en un proceso de negociación que como el concepto lo indica son condiciones que se ceden de parte y parte.
4.- Ya encima e inevitable la firma de los tratados introducen el "pacto de neutralidad" para que fuese usado dicho argumento para que fuéramos nosotros, en el Referéndum electoral aprobatorio, los que termináramos negándolo. Y de hecho fue el principal argumento utilizado por los que abanderaron el "No" a los tratados en dicha consulta popular convocada para el 23 de octubre de 1977. Todavía hoy,  41 años después, existen los ilusos que siguen abanicando el argumento sobre el derecho concedido a la Casa Blanca de intervenir militarmente en nuestro país; cuando ya está harto demostrado que los EEUU no necesitan de ningún tratado para invadir o destruir el país que les de la gana, siendo la correlación de fuerzas internacional las que lo determinan.

Los gobiernos imperiales de los Estados Unidos de Norteamérica, manipularon y manipulan la buena fe e ingenuidad política de amplios sectores de la población panameña,  incluyendo a dirigentes que se hacen llamar revolucionarios. Estos últimos, no les da la gana (no sé si por testarudos o por agentes infiltrados) de comprender que, dado los resultados históricos incuestionables, el camino de la futura revolución socialista panameña esta alfombrado -obligadamente- por el reconocimiento y abanderamiento de la Revolución Torrijista de Liberación Nacional. Están obligados a realizar los ajustes teóricos y literarios necesarios para ponderar y consensuar esta realidad; sin lo cual, cada vez que estudien el Socialismo Científicos (único camino para encontrar las herramientas necesarias para lograr una revolución) se encontrarán con un abismo de incoherencias que les impedirá dar respuestas al qué hacer, como también les impedirá saber el qué les está pasando; de no hacerlo las actuales dirigencia, inevitablemente lo harán las nuevas generaciones que los relevarán...

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(*5) La frase textual de Simón Bolívar, expresada muchos años antes de los análisis realizados por Marx y Engels, es: "Los Estados Unidos parecen destinados por la providencia para plagar la América de miseria en nombre de la libertad."


4/8... Noriega el patriota, será un cuento surrealista?...

4.- LOS HECHOS      

Son muy poco serias y responsables las biografías que aparecen en la red del ciberespacio sobre Manuel Antonio Noriega; principalmente, debido a la necesidad de satanizarlo para justificar el genocidio cometido por el Ejército Norteamericano en 1989 y, de carambola, sostener el velo que desde 1981 se le mantiene a Torrijos. Al final, es "natural" que ocurra dicha confusión: La lucha de clases en el plano ideológico es la primera línea de combate en todas las épocas;  por tal motivo, la primera gestión de la clase opresora será querer borrar o distorsionar la realidad en la consciencia social de las masas oprimidas; e intentarán lo mismo en el plano de la "consciencia universal", tal como se analiza en el micro-ensayo "Consciencia Universal y lucha de clases" (www.pinzonmartinez.blogspot.com). Empero,  lo poco que hay es suficiente para los objetivos de este análisis.

En forma desordenada y borrosa, escriben que nació el 11 de febrero de 1934 en el seno de una familia humilde, vivió en Santana, estudio en el Instituto Nacional (Nido de Águilas), adquirió una beca para la escuela militar en Perú e ingresa en 1962 a la Guardia Nacional con el rango de Subteniente. Ah, hay algo más en los desperdigados datos malintencionados que aparecen en la webs: escribió poemas y artículo de contenido antiimperialista. Veamos, ahora, que podemos hacer con tan abundante cantidad de información.

El que viviera en el barrio de Santana y estudiara en el Instituto Nacional entre 1944 y 1952 (entre sus 10 y 18 años de edad) colocan al joven Manuel en el preciso centro de los acontecimientos, y los protagonistas, de  los relevantes y heroicos sucesos que determinaron el futuro de la construcción de la consciencia social panameña, como fue el rechazo del Convenio Filos-Hines en 1947.

En dicho convenio los Estados Unidos pretendían que se le extendiera el plazo de  permanencia de los 14 emplazamientos militares  existentes fuera de los límites de la Zona del Canal, construidos a lo largo del país debido a la II Guerra Mundial. En su momento más culminante de la lucha, la población panameña, vanguardiazada por la dirigencia estudiantil  del Instituto Nacional  (donde estudiaba Noriega), la Federación de Estudiantes (FEP) y las asociaciones magisteriales, rodearon las instalaciones de la Asamblea de Diputados, dispuestos a linchar inmediatamente a todo aquel que aprobara dicho documento lesivo a los intereses nacionales; bajo coacción votaron en contra por unanimidad. Es 95% seguro que Manuel Antonio estuviera entre la multitud delirante. Ese 95% pasa a convertirse en 100%, cuando leemos que escribió sobre temas patrióticos.

Aquí está lo que nadie quiere narrar en ninguna de las biografías presentadas en la red; ya que estos hechos determinaron para siempre la consciencia social de todos los panameños; y obligadamente también la de Manuelito. De la misma manera en que marcara a Omarcito (Torrijos) el mango que recogiera de un árbol existente en "Territorio Zonian" y un soldado gringo lo obligara a botarlo.

La formación política de Manuel Antonio también estuvo influenciada directamente por la generación literaria del 44 (Joaquín Beleño, Ramón H. Jurado, Tristán Solarte, Rogelio Sinan, entre otros), los que construyeron una literatura patriótica y revolucionaria que nada tenía que envidiarle a la de otras latitudes; pero que además, no se queda en los depósitos de las bibliotecas o en los armarios como alimento de comejenes,  sino que nuestros autores junto a los dirigentes populares se preocuparon de que fuese consumida masivamente por la población como arma fundamental de sus luchas. (*6)

Luego ingresa en 1962, contando con 28 años de edad, a la Guardia Nacional;  la que no hacia ni 10 años eran policías de pito y tolete. Los norteamericanos la tenian sometida a la humillación; siendo el General Remón Cantera (asesinado por los gringos por sus exigencias patrióticas) el que  negocia que la policía pudiera usar armas. Esta fecha es más importante aún,  porque dos años después de su ingreso al cuerpo castrense fueron los sucesos del 9 de Enero; donde la euforia nacional fue tan grande, que son acuartelados los policías por temor a que terminaran arreándoles balas a los gringos. Es uno de los mártires de esa gesta el Sargento Celestino Villarreta, héroe de la nacionalidad panameña y estandarte insignia (en el silencio) de nuestra Fuerza Pública (Guardia Nacional, antes; Fuerzas de Defensa después; hoy Policía Nacional).

Esta fecha de ingreso a la Guardia Nacional marca un punto de encrucijada del que es muy difícil no ser influenciado en forma determinante,  incluso sin ser miembro de la institución armada; como efectivamente sucedió con la nación panameña en su conjunto. La oligarquía, en el poder, eran los únicos que no le importaba si los policías seguían usando solamente "pito y tolete", si los gringos humillaban de mil formas a la población y a la patria; o si la relación con el país más poderoso del mundo, lo único que traían de beneficio a la economía nacional era la prostitución,  alcohol y drogas. No obstante, por lo anotado en los antecedentes,  hubo importantes escisiones dentro de esa clase,  como la asumida por el Presidente Rodolfo Chiari, el que valientemente rompe relaciones diplomáticas con los Estados Unidos como consecuencia de los sucesos del 9 de enero de 1964.

Cuando el Mayor Boris Martínez, jefe de la policía en la provincia de Chiriquí,  inicia la ejecución del Golpe de Estado, el 11 de octubre de 1968, (no aparece la información) tengo entendido que el Capitán Manuel A.  Noriega estaba encargado del importante distrito bananero de Puerto Armuelles en esa provincia  (en Paso Canoa, estaba el subteniente Herrera). En el siguiente año, Noriega es ascendido a Mayor y puesto en la jefatura de la misma región.

Bueno,  hasta aqui podemos observar los contrastes de un militar que aunque ya asimilado por los Servicios Secretos Imperiales, fluían por su torrente sanguíneo el sentimiento patriótico que bajo el liderazgo de Omar Torrijos, adquiere consistencia práctica. Su formación específica en asuntos de "inteligencia" obtenidos a través de la instrucción de los propios gringos, le impidieron ser revolucionario; no obstante, nunca desatendió o traicionó ninguna solicitud de Torrijos; ni siquiera ese 16 de diciembre de 1969, cuando iluminaron con antorchas y faroles de autos la pista de Chiriquí,  para que aterrizara la avioneta que traía la futura historia de la patria demostrando su honor y valentía.

Queda, a lo largo de los 10 años siguientes, la pregunta de ¿cómo se las pudo ingeniar para seguir cobrando a la Central de Inteligencia Norteamericana un cheque de afiliado mientras participaba activamente en la revolución panameña? No podemos dejar de anotar aqui, que este corto exilio de 24 horas del General Torrijos fue organizado por los mismo a los que el Mayor Noriega cobraba un salario por sus servicios. En broma y en serio,  es muy posible que se haya excusado conque "no estaba enterado" o "nadie me dijo nada".

No obstante, los métodos seguidos por él, diferían totalmente a los de Omar. Métodos que, como veremos, fueron los que facilitaron la invasión del 20 de diciembre de 1989. Y como consecuencia histórica,  la derrota electoral recibida por Balbina Herrera en el 2009, detallado los hechos en el capítulo "Quienes son los culpables" del libro "El Diputado".

Tanto Manuel Antonio Noriega como Omar Torrijos entendían perfectamente las diferencias; pero estoy totalmente seguro, que también entendían perfectamente la necesidad de complementar los dos métodos en el logro del objetivo de eliminar la "quinta frontera". Fue una década en donde la genialidad de varias generaciones de panameños convergieron en un solo puño de voluntades que trascendió al mundo en una poderosa, increible, valerosa, astuta, y genial "Mano de Piedra".

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(*6) Ejemplo que deberías seguir los dirigentes actuales. En la época en que fui militante orgánico, NO existían las directrices de obligatoriedad en la lectura y estudio de la literatura revolucionaria; el empirismo formativo, la casualidad, eran los principales motivadores ...
¿Será que en forma muy sui géneris, en todas las organizaciones revolucionarias de Panamá  y América, le han dejado esta tarea a las Escuelas de Cuadros? ¿Olvidando las células a darle continuidad programática permanente a este fundamental aspecto?
El verdadero éxito de Lenin, Mao, Ho, Fidel, Chávez... Ha sido su profundísimo conocimiento de las teorías revolucionarias (Socialismo Científico)... E inducir (obligar) a todas sus bases a mantener ese estudio. Incluso el General Torrijos (enarbolando la bandera de pendejo) era gran conocedor del mismo; ya siendo Capitán, se reunía mensualmente con un grupo de la intelectualidad socialista activa; contándome Ornel Urriola (Comunista), sobre una experiencia vivida, que tenía una memoria en extremo prodigiosa.


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5.- REVOLUCIÓN TORRIJISTA    

"Ser demócrata (democrático) es tener presente en la práctica los intereses de las mayorías del pueblo. Ser revolucionario es demoler del modo más resuelto e implacable todo lo dañino y caduco." (*7) Sin la más mínima duda, lo ocurrido el 11 de Octubre de 1968 fue una revolución que demolió implacablemente todo lo caduco; fueron suspendidas las Garantías Constitucionales,  disuelta la Asamblea de Diputados, destituido el Presidente de la República, ilegalizados los partidos políticos, entre muchas otras acciones. Faltaba, para definir su carácter revolucionario, la sustitución de esas instituciones destruidas por nuevas.

No estaba para nada claro la dirección de ésta revolución; empero,  el primer paso ya estaba dado: Se había sustituido la clase social oligarca en poder del Estado, por una nueva clase social emergente de las capas medias y la pequeña burguesía; en donde las capas medias y representantes de los trabajadores tenían el control principal. Todo esto sucedía bajo las barbas de los operadores imperiales; y es un ejemplo de lo que le ocurrirá eventualmente a los propios Estados Unidos y al resto de los países capitalistas. Dado que la policía la tuvieron sometida por tantas décadas al "pito y tolete", la oligarquía nacional no le era de ningún interés ser miembro de ella; dejándole los espacios de jefatura a los representantes de las clases oprimidas.

Se desencadena, entonces, una feroz lucha de liderazgo y de orientación del nuevo Gobierno Provisional; lucha que culmina con los sucesos del 15 y 16 de diciembre de 1969, donde finalmente triunfa el espíritu patriótico y revolucionario bajo el liderazgo del General Omar Torrijos.

En la madrugada del lunes 15 de diciembre de 1969, ya siendo el General Torrijos el jefe máximo del Gobierno Provisional, estando en Méjico, sus subalternos traicionan y lo destituyen del poder. (*8) Al momento de conocida la noticia por la comitiva en Méjico, y tal como lo hacen los héroes, deciden regresar inmediatamente,  asumiendo los riesgos que esa decisión implicaba.  Luego del regreso del General Torrijos al país la madrugada del 16 de diciembre de 1969 y consolidado el poder entorno a su liderazgo, la revolución se desarrollará con muy pocos obstáculos dentro de las fuerzas dirigentes. Pasan a la construcción de las nuevas instituciones y políticas que sustituyeron las caducas existentes y destruidas: Se crea la Asamblea de Representantes, como poder absoluto, la que escogería al Presidente; es un sistema parlamentario parecido al de Inglaterra; es ésta Asamblea la que confecciona una nueva Constitución,  etc., etc.

Lo más importante, es sustituida del poder a la oligarquía, que históricamente lo controlaba;  instaurándose el gobierno de la "meritocracia": Los negros, mestizos, indios, los eternos excluidos,  por primera vez en la historia, tienen participación efectiva en el gobierno. Hoy (49 años después) vemos como todos los negros, cholos, indios... provenientes de la profunda miseria que actúan en la Asamblea de Diputados y en otras instancias de poder gubernamental, en aquella época oligárquica no tenían la más mínima oportunidad empero actúan traicionando a su clase y su procedencia; los niveles de corrupción en todos los planos, hoy 2017, son parecidos a los que propiciaron la revolución de 1968, creándose las condiciones de una nueva revolución.

Rara vez en la historia universal un dirigente es depuesto del poder del Estado e inmediatamente restituido. Lo ocurrido con Omar es un acontecimiento extremadamente raro en la historia;  mucho más, si vemos que todo esto sucede en las entrañas del poderoso y desalmado Comando Sur,  la CIA y la Embajada Yanqui; ni que decir, ellos  auspiciaban la destitución. El otro caso conocido es el de Hugo Chávez en Venezuela en el 2002, el que solo estuvo 48 horas destituido. Curiosamente, esta coincidencia entre Omar y Hugo no la expuse en el capítulo referente a Chávez que aparece en el libro "Es inevitable". Estando en Méjico al General Omar Torrijos le comunican de su destitución en la mañana del lunes 15; y en la madrugada del 16 de diciembre de 1969 estaba aterrizando en Chiriquí, bajo la protección del Mayor Manuel Antonio Noriega. Fueron tan solo 24 horas de euforia por parte de los golpistas.

El método que el Mayor Noriega aprendiera de los expertos gringos en la materia, estaba basado en la conspiración, la intriga, la habilidad,  desconfianza en las organizaciones populares y su gestión de masas, etc. Muy distinta y diametralmente opuesta al método del General Torrijos. Sin embargo, Omar supo utilizar todos los métodos, todos los recursos, toda las posibilidades, todas las personas, etc., que pudieran aportar al objetivo central que era la descolonización; utilizándolas en una estrategia única con una asombrosa variedad de tácticas que fueron las que determinaran la derrota de las mentes políticas más versadas del mundo imperial, no solo en sus experiencias sino también en recursos.

En este sentido el General supo utilizar magistralmente la brillante capacidad y habilidades del Mayor Noriega;  colocándolo en la jefatura de la inteligencia y contrainteligencia (G-2) de la policía en 1970, la que dirigiera permanentemente hasta su ascenso a General en 1984. Nuevamente surge la pregunta de ¿cómo se las pudo ingeniar para mantener una estrecha relación de funcionario de la CIA, cuando era evidente y expreso su total compromiso y fidelidad a Omar Torrijos? Ya fallecido, es casi imposible responderla, a menos que entrevistemos a Cleto Hernández, su fiel e igualmente brillante lugarteniente.

Lo cierto es que Noriega se convirtió en el mejor lanzador de bolas como también el mejor receptor de todas las intrigas fraguadas por el imperio y sus aliados internos con el fin de destruir la revolución. Lastimosamente nunca logró aprender el método revolucionario, estrechamente apegado a las masas populares y a la promoción de sus organizaciones como factor decisivo para derrotar todas las intrigas, estrategias y tácticas que el Departamento de Estado de EEUU diseñara para derrotarla. Sin embargo, su papel de receptor y lanzador fue fundamental y determinante en el éxito general de cara a la firma de los Tratados Torrijos-Carter.

La Revolución de Liberación Nacional Torrijista tuvo su final al iniciar la ejecución de los tratados canaleros el 3 de octubre de 1979. Este final sucede no solo como fenómeno teórico, dado el inicio del logro de su objetivo, mucho más cuando se cernían sobre ellos las más duras conspiraciones para evitar su cumplimiento; sino que, como parte de los acuerdos para la firma de esos tratados (lo más lesivo a nuestra independencia y soberanía), se negoció el desmontaje de las estructuras políticas construidas por la revolución.

Es necesario explicar que los dirigentes torrijistas entendieron que la prioridad era la eliminación de la "quinta frontera" y la "perpetuidad" que en 1903 se le concedió a los EEUU sobre el Canal,  por encima de cualquier otro factor político; para que las nuevas generaciones pudieran interactuar con una independencia superior en la continuidad de la construcción de la nación. Como la historia, 40 años después, ha demostrado en forma contundente; colocando en el basurero de los tiempos a todos aquellos y todos los ridículos argumentos que se esgrimieron en su contra; aun hoy, como producto de la testarudez, siguen insistiendo en repetir los desaciertos... Un sector de los que las repiten, se hacen llamar revolucionarios; y es muy seguro que lo sean, pero por el camino de falsear la verdad para justificar sus errores pasados jamás lograrán ganarse la fidelidad de las masas.

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(*7) Lenin, La catástrofe que nos amenaza y como combatirla. Obras Escogidas, tomo 2/3, página 129.

(*8) Aunque no estamos dispuestos a escribir sobre traidores, solo señalaremos el papel que cumplió el oficial que invitara al General a Méjico y estando allá no quería regresarse con el grupo; luego fue el más beneficiado con su muerte.

Nota: Escribo Méjico con "j" porque con "x" es en gringo.


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6.- REPLIEGUE

El General Torrijos cumplió con lo acordado tras bastidores. Se hicieron los cambios en la Constitución que creaba una rendija para que pudieran resucitar las caducas y dañinas estructuras enterradas en 1968, se legalizan los partidos políticos, etc.; y se repliega de su gestión de poder.

Sin embargo, los Republicanos no tenían la más mínima intención de cumplir. A solo 6 meses de asumir el poder presidencial del imperio,  asesinan al General el 31 de julio de 1981 y dan inicio a la estrategia de desmantelamiento de todos los liderazgos patrióticos y revolucionarios para colocar en el país un gobierno dócil que les permitiera renegociar lo pactado.

El mando militar que le sucediera a Torrijos vuelve a reformar la Constitución en 1982 y convierten esa rendija en una puerta completamente abierta para que los fantasmas del pasado hiciesen su entrada triunfal en el presente; gestión esta que era el paso siguiente al asesinato de Omar. (*9)

El ahora Coronel Noriega, tras magistrales jugadas del más refinado ajedrez, engaña a su predecesor para que pida la jubilación y llega a la jefatura de la ahora Fuerzas de Defensa con el grado de General en octubre de 1983. A lo largo de toda su carrera fue escalando rangos potenciando las herramientas que había muy bien aprendido y, con su enorme ingenio y astucia, resolviendo las tareas que Torrijos le asignara; impidiendo que pudiera alimentarse de otros métodos; incluso los utilizados como parte principal de la estrategia global llevada por el comando de dirección de la revolución torrijista. Ni que decir, su aporte a la revolución de Liberación Nacional estaba directamente relacionado a ese conocimiento y experiencia.

A partir de entonces las estrategias para negociar con los "demonios del averno" estuvieron equivocadamente enmarcadas en creer que podía llegar a un entendimiento con ellos convenciéndolos de que existía un liderazgo y una dirección del país que protegía sus intereses. Va entregando concesiones a los gringos, que éstos aprovechan para apretar más el tornillo de la intervención.

El Departamento de Estado Yanqui lo entienden no como el líder de un gobierno amigo que busca un entendimiento plausible para ambas partes; muy por el contrario, lo veían como el empleado que está obligado a hacer lo que el patrón le ordena y así trataban a todos los panameños. Como consecuencia, cada concesión, ellos la utilizarían para aumentar la presión. La fecha límite para renegociar los Tratados era enero de 1990.

Primero entrega al movimiento estudiantil, prohibiendo y cerrando las asociaciones estudiantiles en las instituciones educativas,  expulsando a los dirigentes que trataran de oponerse (leer capitulo "Del macartismo al pandillerismo" del libro "Es inevitable" gratis en el blog). Los sectores reaccionarios de dentro de las fuerzas Torrijistas muestran sus garras; a la sazón la Ministra de Educación, Susana Richard, participa activamente de esta lapidación del principal pilar histórico del torrijismo y de la nacionalidad panameña. Todavía hoy le rinden honores a dicha Ministra dentro del P.R.D. En la Casa Blanca debieron celebrarlo con euforia, ellos nunca se olvidaron del rechazo del convenio Filos-Hines en 1947 ni del 9 de enero de 1964; en esta última fecha las masas panameñas recorrieron las avenidas destruyendo toda empresa gringa...  Pero esa celebración en la Casa Blanca tomo grados de delirio, cuando en el Congreso de la Federación de Estudiantes (FEP) de 1985 terminaron de liquidar dicha heroica organización popular y juvenil.

Luego entrega la candidatura a Presidente para las elecciones a efectuarse en mayo de 1984; impone a un candidato avalado por la Embajada Yanqui,  enfrentándose abiertamente a los liderazgos naturales en ascenso de las fuerzas torrijistas concentrados en el Partido Revolucionario Democrático.(*10)

Veamos el asunto del tornillo: No más habían pasado algunas semanas luego del triunfo del Presidente avalado por el Departamento de Estado gringo,  cuando éstos promueven grandes movimientos de masas en contra del "régimen" con el supuesto de que hubo fraude; rápidamente lo llevan a una huelga nacional de médicos y el CONEP a finales de ese mismo año. Este movimiento fue controlado... Empero, Noriega siguió con su plan plagado de astucias, seguro que podía ganarle la partida a los sectores más reaccionarios de la sociedad norteamericana, convenciéndolos de que era posible llegar a un entendimiento favorable con él. Desconociendo que lo que menos le interesaba a este sector era llegar a acuerdos; su interés, que respondía a un sentido de propiedad que se les había erróneamente formado,  era el de recuperar en su totalidad el Canal renegociando lo pactado.

Pasó a reformar el Código de Trabajo (que fuese entregado a los trabajadores en 1972 de manos del propio Torrijos); su primer intento en 1985 fue rechazado en el primer día de Huelga Nacional de los trabajadores organizados en CONATO. Un año después vuelve a intentarlo con los mismos resultados. En esta segunda Huelga Nacional que durara 2 días, se desató represalias selectivas de dirigentes sindicales vinculados directamente al torrijismo y al gobierno. Aislándose cada vez más de las grandes masas populares.

Esta estrategia lo que demostraba era su debilidad. Los demonios del infierno seguían apretando el tornillo: Asesina y dejan en pedazos el cuerpo de un médico con algún reconocimiento público, para que causara una conmoción nacional,  que les dio total resultado. Éste atroz hecho de sangre "por casualidad" fue realizado en el mismo momento en que había una Asamblea Nacional de periodistas en el área donde se encontraron los pedazos del cuerpo. (*11).

En ningún momento el General Manuel Antonio Noriega pudo percatarse de su equivocada estrategia; y dado lo expuesto, le era imposible hacerlo, toda su vida le había dado excelentes resultados. No le era posible de ninguna manera recoger la experiencia de Torrijos que convierte su gobierno en fomento de las organizaciones populares y el bienestar de las grandes mayorías desamparadas, como principal línea estratégica en su política para rechazar las embestidas imperiales. A Torrijos en su momento le recetaron los mismos métodos que ahora le aplican a Noriega, sin que ninguno pudiera prosperar. (*12)

Pasa a terminar de liquidar los restos estructurales de "La Tendencia" (poderosa organización progresista que fuera, en los inicios de la revolución en 1968, la juventud del Partido Comunista). Nada de los sostenidos esfuerzos que hiciera Noriega cambiaron la estrategia y táctica imperial; muy por el contrario, se hundía más en la medida en que había logrado debilitar y más aún destruir las fuerzas capaces de defenderlo.

 El 4 de marzo de 1988, el gobierno reaccionario de E.E.U.U., (principal amenaza a la paz y la seguridad del mundo) se pasa por los genitales los acuerdos y compromisos internacionales adquiridos y congela los activos panameños depositados en su jurisdicción; la Comisión Bancaria decreta el cierre de los bancos para evitar la estampida. A partir de este momento la tenaza de la invasión ya estaba colocada,  era cuestión de tiempo;  fecha límite 31 de diciembre de 1989.

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(*9) En estas reformas constitucionales, casi que de inmediato al asesinato de Omar y no habiendo pasado ni 5 años de las realizadas anteriormente, es uno de los factores que demuestran por una parte, la traición;  y por otra,  la verdadera estrategia imperial.

(*10) En el Cuartel de Tinajita son reunidos los dirigentes populares del PRD y obligados a dimitir la candidatura de Ernesto Pérez Balladares por la propuesta favorable a la Embajada, Nicolás Barleta.

(*11) Este tema es profundamente analizado en el libro El Diputado o la muerte del príncipe. Luego, se extrae el tema y se presenta en la revista digital "Viejas discusiones,  nuevas energías" donde comparándolo a la
"Operación Gladio" en Europa (ver YouTube) hace una tercera comparación al asesinato del Fiscal Nishma en Argentina. Habría que averiguar quién financió o promovió esa asamblea de periodistas; seguro podríamos encontrarnos con una sorpresa de planeamiento global del horrible hecho de sangre.

(*12) Incluso las acusaciones de narcotraficante quisieron montarle al General Torrijos,  a lo que el respondía con más revolución,  entre muchas otras acciones y medidas,  como por ejemplo exilia a toda la dirigencia del CONEP y establece relaciones diplomáticas con Cuba, en la época del "Plan Cóndor" y en las misma barbas, pienso que barbas es muy poco... en las mismas entrañas del Comando Sur; estas medidas fueron más que revolucionarias (si con esta expresión encuentro la palabra adecuada)... El bloqueo que los EEUU le tiene a Cuba,  en ese entonces (1973) era total; la isla revolucionaria solo mantenía relaciones diplomáticas con Méjico.



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7.- INVASIÓN  

En el poema Humo y Cenizas (*13) hay una presentación histórica de los acontecimientos; en su dinámica señala "3 años de sueños truncados",  agónicos e interminables, casi siglos. Ese largo período de presión sostenida por parte de #USAlaViolencia se inicia el 6 de junio de 1987, cuando un Coronel sale de la hediondez de las cloacas de la traición, se acuartela en "su mansión", junto a un grupo de seguidores bien armados, y da inicio a una diarrea de denuncias (en la mayoría había sido protagónico) que son utilizadas, junto con el vuelo publicitario que representó, para una nueva escalada política de la oposición; la que utiliza el evento para renovar y reagrupar sus fuerzas.

El 9 de junio, usando como bandera las denuncias del Coronel y la del asesinado Doctor,  la oposición pasa a denominarse Cruzada Civilista sobre las cenizas de la derrotada COCINA. Nada de esto fue casual,  solo lo era para observadores ingenuos, y responde a movimientos tácticos diseñados con precisión de cirujano por el imperio. Una coordinación de grupos políticos (incluyendo a las jerarquías católicas) y fechas tan precisas, solo es posible realizarlas por un armador externo que fuera capaz de convocar a personas tan disímiles y que llevara atentamente el pulso de los acontecimientos... obviamente el único es el Departamento de Estado de EEUU.

Ya para este momento el General Noriega había puesto a la mayoría de las organizaciones populares en estampida o a la defensiva con muy poca o casi ninguna capacidad de respuesta. Sus dirigentes, sin embargo, entienden que el enemigo principal, y detrás de todo, son los gringos que viene con la decisión expresa de revertir los tratados Torrijos-Carter, pasan a recomponer sus maltrechos liderazgos para darle cara y "combatir al imperialismo donde quiera que se encuentre"(*14); independientemente de que un gran número, por no decir la mayoría, de los que sustentan el poder, lo hacían para defender sus privilegios,  contratos y altos salarios; ni que decir, defender al "tuerto, manco y sordo" (como describe el poema a nuestro General especialista en conspiración).

Y realmente hasta el final, el General Manuel Antonio Noriega demostró ser de los mejores en el mundo en su ramo de especialidad; pero sus maestros tenían y tienen muchos más recursos como al final demostraran. Esta nueva escalada, iniciada con la acción conciente de la sumisión al imperio por parte del Coronel, nuevamente las  Fuerzas de Defensa  logran controlar  exitosamente. No  obstante, el imperio "antes que se  desinfle  tanto  esfuerzo, congela  los  fondos  que  Panamá tiene en depósito en Nueva  York y crea un  estado de sitio al  país; pasan a dirigir  directamente los acontecimientos  políticos de la oposición, haciendo  un  llamado a no pagar impuestos,  congelando los fondos que debían entregarle al gobierno producto del Canal de Panamá, etc." (*15) Esta última fase de la estrategia norteamericana para lograr su objetivo de renegociar los tratados inicia el 4 de marzo de 1988, a un año de las elecciones presidenciales de Panamá a efectuarse en mayo de 1989.

Pienso que Noriega no entendió el verdadero interés de la Casa Blanca hasta llegado este período de agresión directa; cuando lo único que quedaba por hacer era resistir lo más que se pudiera. No se si esa resistencia contemplaban la meta de enero de 1990, momento en que le correspondía a Panamá nombrar al Administrador del Canal como parte de la transición pactada en los Tratados. Pero de lo que si estaba seguro entonces, es que para los gringos era vital impedir que llegaran a esa fecha; en el caso de ellos, era debido a que posterior a esa fecha se hacía muy difícil la renegociación de los Tratados,  no importando que gobierno existiera... El que lograran cambiar el gobierno en mayo de 1989, era un óptimo momento como veremos más adelante.

En un comunicado enviado por el General Noriega a la IX Cumbre de los Países No Alineados (*16), escribe:  "Durante los dos últimos años de la  administración Reagan se nos exigió renegociar la prórroga de la presencia militar y las bases en el Istmo más allá del año 2000, y sin ningún respeto por nuestro honor de soldado, se  nos quiso forzar el empeño de tropas y unidades especiales de las Fuerzas de Defensa en la agresión militar contra la nación hermana de Nicaragua". Demuestra con ello que ya era plenamente consciente del objetivo central de los gringos; más adelante escribe sobre la naturaleza de la agresión:
"Arbitrariamente, el Presidente de los Estados Unidos ordenó  No Pagar a la República de Panamá  las Rentas y Beneficios de la operación del Canal pactados en el tratado,  la retención ilegal de los impuestos y cuotas de seguridad social descontados a los  trabajadores panameños del Canal, el congelamiento de millones de dólares del Banco Nacional depositados en  bancos norteamericanos, conforme a acuerdos monetarios previos y la confiscación de aviones de la línea estatal; se prohibió a las empresas norteamericanas pagar impuestos  al gobierno de Panamá, se incrementó el número de tropas y se está introduciendo en  las bases militares centenares  de tanques, vehículos blindados y aviones y helicópteros  de  combate con la evidente finalidad de doblegar a la conducción panameña e imponerle a la República de Panamá  un gobierno dócil, dispuesto a revisar los  tratados Torrijos-Carter, o  tolerar  su incumplimiento, y convertir a Panamá  en peón de la política continental de los Estados Unidos." En este otro párrafo, reitera y puntualiza sobre el objetivo de incumplir los tratados canaleros.

Llegada la fecha de las votaciones, mayo de 1989, ya los gringos tenían bien aleccionados al electorado. La campaña civilista de desprestigio por dos años con los elementos ya descritos, más la feroz guerra económica desencadenada luego de la congelación de los fondos panameños en Nueva York en marzo de 1988, colocaron a la población de Panamá en un desasosiego tan grande, que estaban dispuestos a votar hasta por el diablo si fuese necesario con tal de acabar ya con ese estado de incertidumbre. Como efectivamente sucedió, la oposición barrió masivamente en todas las urnas. Tengo entendido que el Partido del Pueblo alertó al respecto de lo viciado de esos comicios electorales,  pero fue desestimado. De alguna manera se las ingeniaron (igual que hicieron en Venezuela para las elecciones de diciembre de 2015) para hacerles creer a los comandos políticos, incluyendo al General, que tenían alguna posibilidad de ganar.

Como todos ya saben, ante tales circunstancias y sorpresa, son recogidas las urnas y anuladas las elecciones de mayo de 1989. Con las consecuencias posteriores del aislamiento internacional de, ahora si,  el "régimen de facto". La invasión era ya la opción inminente e inevitable.

Como hemos visto paso a paso, nuestro General en ningún momento varió su planteamiento estratégico; y como hasta ahora había podido sortear todas las dificultades, aumentaba más su confianza en ganar esta última amenaza por la vía de la conspiración y astucia. En ningún momento pudo percatarse que era exactamente ese planteamiento el que lo había llevado lentamente más profundo en su aislamiento. En su ceguera inevitable, como hemos analizado, sigue asumiendo que puede llegar a enero de 1990, y se me ocurre que creería posible en ese momento negociar. Así que pasa a montar métodos revolucionarios, pero sin la consistencia mística que aportan las organizaciones populares, las únicas que le dan su naturaleza inquebrantable. Los CODEPADI y los Batallones de la Dignidad, si bien es cierto ayudaron a que la invasión se prorrogara hasta el último momento, carecieron de la confianza de los mandos militares, por lo que no les dieron ni la formación completa ni mucho menos las armas requeridas para una realidad como la que se avecinaba; confianza que solo puede emanar de un liderazgo revolucionario que dichos mandos no tenían.

Inmediatamente, asumo,  anuladas las elecciones de mayo de 1989, se iniciaron los preparativos para invadir. Implicaba terminar de aislar internacionalmente al país  y de crear conflictos de orden disciplinario a lo interno de las Fuerzas de Defensas para reducir su capacidad de fuego al mínimo. Recorriendo en mi mente los acontecimientos, 27 años después, observo que con toda la tecnología que trajeron los invasores para experimentar y los dos golpes militares que impulsaran para debilitar la unidad interna de las Fuerzas de Defensas,  las bajas que tuvieron los gringos fueron considerables. Ese parte de guerra todavía hoy es un secreto; tan oculto, como los resultados del genocidio que cometieron.

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(*13) Poema referente a la invasión,  en una presentación audiovisual que aparece en YouTube tiene más de 7,000 visitas y el la presentada en la revista digital "Viejas discusiones, nuevas energías" (www. pinzonmartinez.blogspot. com) lleva más de 85,000 visitas.

(*14) Máxima expresada por el Che Guevara

(*15)El diputado (digital),  pág 32

(*16) Tomado del libro "La verdad sobre la invasión"  del autor Olmedo Beluche.



8/8.... Noriega el patriota, será un cuento surrealista .......  8/8

8.- AL CIERRE  

Cuando me imagino las posibilidades, la diferencia, las ventajas y desventajas de la persona que tiene mucho poder con el que no lo tiene o el que lo tiene menos; llego a la conclusión que es ninguna. En última instancia, el que lo tiene menos es más libre que el que lo tiene más. Todos somos prisionero de las mismas calles, edificios, la misma tecnología, los mismos tranques, de las interminables esperas; unos un poquito más que otros, pero prisioneros en fin.

Nos diferencian los compromisos que cada nivel superior implica, más ataduras, estereotipos,  precondiciones, conductas determinadas...  y que responden a intereses de grupos específicos y de clases sociales.

Al final, somos prisioneros de esos primeros 18 años de la vida, en una secuencia ininterrumpida de hechos que someten los siguientes. Romper decididamente con esos nexos es únicamente posible en una revolución. Las revoluciones las dirigen aquellos que viven su vida deshaciendo esos nexos, reconstruyéndose, muriendo diariamente para renacer nuevamente en cada nuevo momento.

Y es una revolución, además, la única que puede resolver la verdadera diferencia que existe: La que consiste en la opresión de una clase social extremadamente minoritaria,  la burguesía, la clase capitalista, que no representa ni el 10% de la población; sobre la otra, la clase trabajadora,  que representa la absoluta mayoría, el 90%.

Había una diferencia significativa entre el que hubiera un gobierno dócil a las pretensiones imperiales a partir de mayo de 1989 y el mismo gobierno desde enero de 1990. Evidentemente que esa diferencia se hacía, cada año anterior, más abismal.

De haberse instalado el gobierno que, bajo el chantaje imperial, ganara las elecciones en mayo de 1989, tendrían 7 meses para urdir todo tipo de situaciones bajo el velo de la ignorancia; eran siete largos meses para preparar con lujo de detalles las presiones, chantajes, sobornos, calumnias, etc.,  para renegociar los tratados con todas las facilidades para la Embajada. Se debe tomar en cuenta que en su afán por llegar a un entendimiento con la Casa Blanca, pero jamás como sea,  el General Noriega nunca puso en primera línea de la publicidad,  de la opinión pública, el verdadero objetivo del imperio de renegociar los Tratados. Las grandes mayorías de la población ignoraban esa pretensión o le era indiferente.

La historia, pasado algún tiempo, se escribe con los hechos consumados, comprobables. Soñar lo que pudo ser o lo que se hubiera querido que fuese, es vivir engañados. La sociedad, gracias a Dios, vive y se construye a partir de realidades tangibles, no de lo que idealizamos.

El gobierno impuesto por la invasión tenía un ingrediente que le impedía ser tan dócil como lo esperaba el Departamento de Estado gringo. Era el gobierno de los arnulfistas (hoy panameñistas), el que su líder histórico Arnulfo Arias había sido derrocado 3 veces por conspiraciones de la Casa Blanca; la última vez había sido casualmente el Golpe de Estado que había dado inicio al proceso revolucionario en 1968, realidad esta que no se los perdonaban. Además que ciertamente, y con toda razón, les nublaba el entendimiento para llegar a acuerdos con la revolución y sus herederos: derrocamiento de su Presidente y decenas de muertos en la guerrilla,  todos los partidos políticos habían sido prohibidos por ese largo período de 10 años, todos funcionaron en la clandestinidad o semiclandestinidad.

El haber resistido hasta el último momento todas las tácticas diseñadas para colocar un gobierno dócil, tuvo su fruto: El primer Decreto que le correspondía firmar al Presidente Panameño, y de ése Partido Arnulfista, en enero de 1990, a escasas dos semanas de iniciada la invasión, era la del NOMBRAMIENTO del Nuevo Administrador del Canal Inter-oceánico; aunque debía ser ratificado por el Congreso de E.E.U.U., por primera vez sería un panameño y escogido por el Presidente de Panamá. Lo que representaba para la clase social en el poder, en este momento la burguesía, unos treinta mil millones de dólares en bienes raíces que quedaban a su disposición y usufructo; cifra que en la visión de caja registradora de la burguesía le daba el valor para plantar el estandarte de batalla. Este hecho histórico era único en el acontecer nacional. Esta realidad "inmediata", sumada a la apreciación política silenciosa expuesta en el párrafo anterior, causaron el nuevo milagro por el cual fueron rechazadas las pretensiones del Departamento de Estado de renegociar los tratados Torrijos-Carter.

Hubo mucho pugilato, presiones,  etc.; pero los tiempos ya no le favorecían a la Embajada Norteamericana. No había espacio ni mucho menos tiempo para preparar escenarios diversos para el chantaje, soborno, amenazas, promoción de la corrupción, etc., artes anti morales de las que los gringos son los especialistas.

Los militares nunca realizan una acción sin una clara,  clarísima visión estratégica de causa, efecto y resultados, no son aventureros. Esto lo  aprenden con lentitud y alto grado de dificultad en la medida en que van escalando los rangos. Este preámbulo tiene el objetivo de presentar un ejemplo de esos escenarios prefabricados cargados de chantaje: El conato de golpe de Estado que realizara un Teniente Coronel en esos meses pos invasión,  que el ejército invasor rápidamente reprimieran, no podía ser otra cosa que un montaje gringo, cuyo objetivo era el de presionar al Presidente Panameño para que se sometiera a las peticiones de la Embajada invasora sobre los asuntos del Canal, único factor de interés mutuo.

La invasión del ejército norteamericano sobre Panamá tenía como propósito adicional, liquidar físicamente cualquier obstáculo futuro a las pretensiones imperiales; tal cual hicieran en Chile bajo el mando de Pinochet; sin embargo, el genocidio causado en tan pocas horas el 20 de diciembre de 1989, fue tan grande que no pudieron sostener dicha meta. Sin embargo,  Cleto Hernández había quemado todos los archivos existentes y no pudieron doblegarlo para que colaborase, razón por la cual fue el último militar liberado, el que estuvo detenido hasta 1999 sin causa judicial alguna.

El asesinato de Torrijos en 1981 y la invasión de 1989 le costo al imperio la fidelidad de casi todos los militares de América; o dicho de otra forma, ahora esa fidelidad le cuesta muchísimo más y es relativa.

Ahora, cavilando sobre los detalles del asesinato del Doctor Spadafora,  de lo que sé hoy sobre la "Operación Gladio" en Europa,  de los cientos de asesinatos realizados por francotiradores gringos, y lambegringos, sobre las manifestaciones de los dos bandos en Venezuela para crear un estado de histeria y guerra civil en ese país; empiezo a acariciar la idea de que el asesinato del Padre Gallegos en 1971,  tuvo el mismo sello.

El General Manuel Antonio Noriega demostró no ser un revolucionario,  pero si un Gran Patriota que no dejó en ningún momento la más mínima oportunidad a los Gobiernos reaccionarios de Estados Unidos para renegociar los tratados Torrijos-Carter. En una época, cuando el imperialismo abanicaba y promovía dictaduras como base principal de su estrategia, todo lo que tenía que hacer para mantenerse en el poder, tal como sucediera con Pinochet (el asesino de decenas de miles de chilenos y de millones de exiliados), era traicionar a la patria; ¡fue conciente de ello y no lo hizo! Demostró su dignidad y patriotismo hasta el final...  De la misma manera en que lo demostrara el General José Antonio Remón Cantera, aún con su política de persecución a los revolucionarios; "ni millones ni limosnas, queremos justicia"... decía el asesinado General Cantera.

Lastimosamente  Noriega, el Patriota,  no pudo dar el salto a la condición de revolucionario como fuera la conducta de su líder Omar Torrijos, el que tenía muy claro que "los Estados Unidos no tiene amigos sino intereses".  Y cuando quiso hacer uso de las experiencias revolucionarias, único camino para derrotar al imperialismo,  ya era muy tarde; ni que decir, no sabía cómo; estaba atado a una secuencia ininterrumpida de hechos que se lo impedían.

Al final fuimos invadidos por el ejército más poderoso del mundo y de la historia,  asesinaron a miles de niños, mujeres,  ancianos; un genocidio implacable, crearon campos de concentración, machacaron y destruyeron la economía del país por tres largos años previo al golpe de gracia; en fin, como dice el poema "Humo y Cenizas", "ácidas y amargas lágrimas surcan el rostro de incontenible dolor, correr y morir..."

Al final, nuestro General terminó derrotándolos, no pudieron lograr el objetivo por el que desataron tanta ferocidad, tanto salvajismo. ¡No pudieron renegociar los tratados!, se quedaron sin nada y se llevaron la indignación nacional y mundial; se llevaron un motete cargado de odios.

Hoy, julio de 2017, a lo interno de los Estados Unidos de Norteamérica  están ocurriendo, al igual que en el mundo entero, grandes  y casi podría decirse que revolucionarias transformaciones democráticas. La clase trabajadora norteamericanas está abriendo (como diría Salvador Allende, Presidente asesinado con el auspicio imperial) las grandes alamedas por donde transitará el hombre libre del mañana. Sus propias contradicciones imperiales ayudan al la profundización de ese proceso; como por ejemplo el proceso legal que le abrieran al ladrón y asesino del Expresidente de la República de  Panamá (el que llegara a ese alto cargo con el concurso directo de la Embajada de USA, remember Pacto de la Cresta) ; o la guerra internacional que le han montado a la compañía brasileña Odebrech, porque sencillamente sus directivos no viven en sus fronteras, ni llevan sus fortunas allá, ni aceptan lineamientos de los eunucos y testaferros  imperiales.

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Dedicado a todos los héroes que murieron en combate.
Capitán Rodríguez, su General murió valientemente como todo un patriota...
 ¡Rompan filas!
 Descansen en paz.

Gloria y honor a los héroes, mártires y combatientes por la patria.

25 de julio de 2017


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